sábado. 20.04.2024

Cada vez es más habitual escuchar música desde reproductores portátiles como MP3, MP4, teléfonos móviles, ordenadores portátiles o pequeñas consolas. Estos equipos disponen de una gran capacidad de almacenamiento de nuestra música preferida pero por lo general los limitamos a un uso personal al utilizarlos con auriculares. Los auriculares son útiles cuando nos encontramos fuera pero incómodos cuando estamos en casa o en la oficina, sobre todo si queremos compartir nuestra música con amigos o familiares.

Por este motivo, cada vez es más frecuente encontrar en el mercado diferentes accesorios que aumentan su rendimiento, convirtiéndolos en equipos de alta fidelidad colectivos.

La I-ball forma parte de esta familia de productos pero aporta dos elementos muy diferenciadores con respecto a otras opciones.

La primera es su sorprendente tecnología, procedente del desarrollo del sónar, que le dota de un extraordinario corazón interior que conduce las ondas sonoras y las concentra en la superficie sobre la que se coloca, haciendo que ésta vibre y actúe como un potente altavoz omnidireccional de 360º.

Esta tecnología permite disponer de varios altavoces en uno sólo pues su respuesta variará considerablemente en función de los materiales y la constitución de la superficie donde se apoye.

La segunda es su elegante, moderno y original diseño y la calidad de los materiales que se han empleado para fabricarlo, que lo convierten en un producto llamativo y diferente.

Con la llegada a España de la I-ball, los amantes de los gadgets tecnológicos disponen de un nuevo y original objeto de deseo.

I-Ball, un altavoz portátil capaz de hacer que tus muebles canten