viernes. 29.03.2024

La habitual cita semanal con el blog de Gregorio Manzano nos deja un llamiento para aparcar los nervios de este tramo final de temporada. Tres encuentros en apenas una semana marcarán el futuro del conjunto bermellón y para ello el de Jaén apela a la épica para acabar el campeonato lo más arriba posible.

A medida que se acerca el final del campeonato de liga la emoción, la incertidumbre y el miedo serán los protagonistas en las próximas jornadas. Emocionante será saber quién quedará en primera posición. Incertidumbre existe por conocer quienes seremos los que finalmente entraremos en la Champions o en la Liga Europea y qué decir sobre el temor de los equipos que están jugando por evitar el descenso.Por todos estos motivos es mejor no perder los nervios y marcar los tiempos de los partidos en su justa medida. El pasado domingo frente al Málaga aparecieron situaciones que nunca nos habían ocurrido y no pudimos ni supimos resolverlas. La victoria era más que necesaria para nuestras aspiraciones después de lo visto en el resto de la jornada, pero el empate nos dejó un sabor agridulce y sobre todo una imagen que ha dado la vuelta al mundo de dos profesionales discutiendo y resolviendo una jugada de forma acalorada.

Aduriz y Keita son dos jugadores distintos en todo, en sus características personales y humanas, con buenas condiciones futbolísticas, uno potente y fuerte y el otro rápido y escurridizo. Ambos son necesarios para el equipo y ambos han tenido un comportamiento ejemplar hasta el día de hoy. La emoción del empate final, la mente puesta en alcanzar un objetivo brillante y el estrés de los minutos finales, hizo que los jugadores no gobernaran su carácter con racionalidad y se dejasen llevar por el descontrol de los nervios.

Mi decisión inmediata después del partido fue dejar enfriar la situación hasta el día siguiente. La prensa demandaba explicaciones, respuestas y soluciones sin parar a pensar que los conflictos se resuelven mejor desde la distancia y el análisis de los hechos. El lunes tras reunirme con los capitanes y con el vestuario después, se analizó la situación y comprendimos la gravedad del hecho. A pesar de ello, intentamos sacar entre todos una conclusión positiva: Todos queremos más, todos queremos ganar.

Una investigación reciente en física cuántica de varias universidades de Japón ha demostrado un hecho insólito para la ciencia: el pensamiento emocional mueve la energía. Es decir, el pensamiento atrae hechos, personas, prosperidad e infortunios a nuestra vida. Detecto en el vestuario esa buena energía, lo que me confirma, que en el pensamiento general e individual de mis jugadores este año está el conquistar un hecho importante para nuestras carreras profesionales y para la historia del club al que representamos.

Me preguntan en ocasiones cómo he conseguido tener al equipo tan unido, a pesar de tantas adversidades y la respuesta es que han tenido un gran orgullo profesional. Esa y no otra ha sido la fuerza motivadora para que el esfuerzo de este equipo, después de 34 jornadas de Liga esté en puestos de Liga de Campeones. Y este es el orgullo que debe sentir nuestra afición por el trabajo que han realizado, pero aún queda lo más difícil que es mantener con seguridad y convicción la cuarta plaza del campeonato.

El próximo domingo comenzamos en Bilbao una ‘semana para la épica’. El miércoles viene el súper poderoso Real Madrid y posteriormente viajamos a La Coruña. Serán los puntos que decidan nuestro futuro. Sólo con unión, esfuerzo, trabajo, solidaridad y conjura colectiva será posible. Todo lo demás no sirve. Y lo más positivo es que dependemos de nosotros mismos y nosotros queremos.

Manzano en su blog: "Es una semana para la épica"