jueves. 28.03.2024

Un total de 6.796 personas de las islas tendrán que tributar las ayudas del Plan 2000E que el Gobierno central, junto con las Comunidades Autónomas, y el sector de fabricantes y concesionarios, concedieron el pasado año para estimular la venta de automóviles, algo que criticó el colectivo de los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) al entender que se trata de una medida "incongruente".

   En declaraciones a Europa Press, el coordinador en Baleares de Gestha, Luis Tato, explicó que estas ayudas son un incremento del patrimonio y, por tanto, deben declararse en la Campaña Renta 2009, aunque consideró que estas subvenciones tendrían que "estar exentas".

   Tato indicó que éstas, al final, "más que ayudar complican la vida" puesto que quienes reciben el dinero no son los ciudadanos, "sino el que recibe el producto", de manera que los contribuyentes "se olvidan" de que tienen esa cantidad que tributar.

   La misma fuente señaló que "casi todas las ayudas hay que declararlas", aunque aclaró que algunas como la de maternidad "tienen un efecto neutro". Entre las que generan más contribuyentes están, además de la del Plan 2000E, la ayuda para el alquiler de vivienda o para la compra de inmuebles.

   El portavoz de Gestha, Salvador Faura, explicó el pasado día 3 que el principal problema es que "no se ha informado al contribuyente de las repercusiones que podrían tener las ayudas en su declaración", por lo que muchas personas pensaron que "no tenían que incluirlas".

   En este sentido, Faura incidió en la repercusión de la retirada de los 400 euros y explicó que "ya está afectando desde principios de enero, desde que se han incrementado las retenciones que practican a los pagadores o retenedores". Por ello, aseguró que "los contribuyentes van a dejar de disponer de algunos ingresos para destinar al consumo, en un momento en el que la economía está en crisis".

   Asimismo, sostuvo que donde más se nota la retirada es "en las nóminas de cada mes, ya que se dispone de menos dinero líquido que el año pasado". Según los técnicos, esta solución es "una gota de agua en un océano de deuda", y aseguran que "no es una solución".

Casi 6.800 contribuyentes de las islas, obligados a declarar las ayudas del Plan 2000E