jueves. 28.03.2024

Un afiliado de UM imputado en el "caso Maquillaje" ha admitido hoy ante el juez que fue contratado por diversas empresas controladas por cargos del partido para trabajar para la formación política en la captación de votos u otras actividades.

Este testimonio confirma las sospechas del juez Juan Ignacio Lope Sola en su investigación sobre el supuesto desvío de fondos públicos del Consell de Mallorca a miembros de UM y la presunta financiación ilegal del partido durante la pasada legislatura, todo ello mediante la concesión de subvenciones a productoras audiovisuales afines a la formación.

Antonio Baró Baulo, que lleva veinte años en el partido y ha sido apoderado e interventor en las tres últimas elecciones, ha reconocido que el ex conseller imputado Miguel Ángel Flaquer le dijo en los últimos comicios que necesitaba que trabajara más activamente para UM, a lo que contestó que lo haría si le conseguían un "trabajo más acorde" que el que tenía de jardinero de 8 a 3 de la tarde.

Entonces "Flaquer le comunicó que ya tenía trabajo y le envió al Consorcio de Informática", ha dicho Baró en su declaración.

Otro de los trabajos que consiguió en los últimos años se lo proporcionó Miquel Nadal en la productora Ambit Digital, si bien su labor nada tenía que ver con la actividad audiovisual, sino que también "trabajó para el partido, en barriadas".

Otro imputado, Sebastián Pastor Rodríguez, ha declarado hoy que fue contratado en un programa de productos mallorquines del Consell y se dedicaba a preparar invitaciones, mirar el periódico "por si había una noticia de interés", recortarla y enviársela a Mateo Cañellas.

Este testigo ha reconocido que ha colaborado con UM, pero no de "continuo" mientras "estaba en esas empresas". EFE

Todas las declaraciones confirman la trama de financiación ilegal de UM