El exalcalde de Muro de UM Jaume Perelló ha sido condenado hoy a un año de prisión, una multa de 360 euros e inhabilitación para empleo o cargo público mientras dure la pena tras admitir ante la jueza haber cometido un delito electoral, al empadronar de forma fraudulenta a varias personas en el municipio.
Asimismo, la sentencia señala que Perelló tendrá que hacerse cargo de las costas procesales que haya devengado la acusación particular (el Ayuntamiento de Muro).
Perelló ha reconocido ante la juez de la sección primera de la Audiencia de Palma, Margarita Beltrán, que, entre febrero y mayo de 1999, empadronó de forma fraudulenta a numerosas personas que no residían en Muro en este municipio, con el objetivo de captar votos en las elecciones de dicho año.
El fiscal pedía para Perelló 4 años de cárcel por este delito pero, gracias a un acuerdo de conformidad con la defensa del acusado, la pena se ha visto reducida a un año, aplicando el atenuante de dilación indebida del juicio, pues los hechos ocurrieron hace casi doce años.
A este respecto, Rafael Perera, abogado del Ayuntamiento de Muro -administración personada como acusación particular-, ha declarado ante los medios, tras concluir el juicio, que está satisfecho con el resultado porque el consistorio "lo que quería es que se demostrase que se había cometido ese delito".
El exalcalde empadronó "a una importante cantidad de personas", según ha insistido hoy Perera, que no tenían ninguna relación con el municipio, de acuerdo con los escritos de acusación, admitidos hoy por Perelló, la mayoría de las cuales se dieron de baja del padrón tras terminar las elecciones.
En unos casos, estas personas fueron empadronadas "sin ningún vínculo entre sí", mientras que en otras aparecieron inscritas en lugares que no constituyen un domicilio, como cocheras o fincas rústicas.
Finalmente, también aparecieron varias personas sin relación entre sí empadronadas en casas de personas allegadas a Perelló.
El juicio contra el ex primer edil tenía previsto prolongarse durante toda la semana debido al gran número de testigos citados, entre los que figuraban el hotelero Miquel Ramis Martorell (exalcalde de Muro por Convergencia Democrática Murera) y Joan Pol, exconcejal del PP de Muro y director general de Emergencias con el Govern de Jaume Matas. EFE
