viernes. 29.03.2024

GADMA, el Grupo de Amigos de Defensa del Medio Ambiente, coincide con la Asociación Alternativa al Tren, que el tren Manacor en Artà hasta Cala Ratjada, es un proyecto consumista de territorio que no respeta el entorno.

Las dos asociaciones coinciden en qué el tren de Llevant impacta brutalmente sobre el territorio. Están de acuerdo en qué Mallorca necesita un transporte público, eficiente y ecológico, que sea substitutivo del coche y no consuma más territorio. Por esto, ambas asociaciones llegan a la misma conclusión que el Gobierno habría de apostar por una red de autobuses ecológicos, que conecten el máximo de núcleos de población de la forma más óptima y sin destruir más territorio. Los autobuses son un medio más flexible que el tren y se pueden adaptar mejor a las demandas estacionales.

El tren es un transporte público adecuado cuando une núcleos de población muy densos y poblados. El tren es óptimo para el territorio cuando el tren va lleno, y lo que cuesta de infraestructuras y de mantenimiento se justifica porque el tren tiene muchas frecuencias y va lleno de pasajeros. No es el caso del territorio del Llevant de Mallorca, dónde la población está dispersa y la densidad de población no justifica el tren como tipología de transporte público.

A Llevant, dónde ya se ha invertido en carreteras y se han hecho rondas de circunvalación, destruir más territorio por poner un tren inflexible no tiene sentido porque no transportará grandes masas de pasajeros. Tiene más sentido poner una red de autobuses ecológicos adaptados a la demanda en tamaño, y que aseguren unas frecuencias óptimas porque una familia pueda prescindir de comprar más coches para poderse desplazar.

El precio del transporte público también es un tema a abordar. Se debe fomentar el transporte público de forma que resulte más económico que ir en transporte privado. Y además, que sea eficiente. Esto significa que las personas puedan prescindir de comprar coche porque en transporte público podrán llegar dónde necesitan llegar (y no sólo a los puntos dónde se pare el tren proyectado).

A Llevant los autobuses AUMASA no son ni eficientes y ni ecológicos, y además son caros. Esto no justifica poner un tren y destruir más territorio. Lo que se debe hacer es poner una red de autobuses ecológicos, eficientes, económicos y con buenas frecuencias que permitan a la población prescindir del coche porque lleguen por todas partes con un tiempo razonable.

El transporte público de las Islas del Mediterráneo

La mayoría de las Islas del Mediterráneo no tienen tren. En cambio hay islas como Menorca o las pequeñas Islas de las Islas Canarias o Malta, dónde las personas se pueden deplazar mediante buses públicos, que son óptimos y suficientes por fomentar la movilidad sostenible con transporte público.

GADMA también se opone al proyecto del tren de Llevant