jueves. 28.03.2024

Los secretarios generales de Comisiones Obreras y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, han considerado "un éxito" la convocatoria de huelga general del 29 de marzo con "manifestaciones multitudinarias, sin precedentes en las capitales de provincia".

Entrevistados en Radio Nacional, ambos líderes sindicales han señalado que las cifras son "elocuentes" y el nivel de participación ha sido "altísimo".

En cuanto a su agenda de movilizaciones, han indicado que seguirán con una campaña intensa de información en las empresas, pero que si el Gobierno no rectifica la reforma laboral y su política de recortes sociales, madurarán la decisión hasta el 1 de mayo, fecha en la que podrían anunciar la convocatoria de un nuevo paro general.

Méndez ha detallado que recurrirán la inconstitucionalidad de la reforma laboral ante el Defensor del Pueblo, elevarán una queja a la Organización Internacional del Trabajo y pedirán al presidente del Congreso y a los grupos parlamentarios que se tramite su Iniciativa Legislativa Popular sobre el nuevo marco de relaciones laborales. En el caso de que el gabinete de Mariano Rajoy "no corrija en profundidad la reforma, tendrán que mantener esta confrontación".

Toxo ha advertido al Ejecutivo que no puede "hacer como si no hubiera pasado nada" porque si mantiene su política de austeridad eso solo "puede conducir a un deterioro gravísimo y la situación económica ya no resiste más".

Voluntad negociadora en la CEOE

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha destacado en RNE que el impacto de la huelga ha sido desigual, mayor en las grandes empresas y la industria y menor en el comercio o los servicios.

Rosell ha subrayado que lo importante "es el día después" y se ha mostrado dispuesto a llegar a acuerdos en la negociación colectiva con los sindicatos, pero ha dejado claro que es el Gobierno el que marca la política económica y toma decisiones.

Además ha avanzado que con los presupuestos que aprobará este viernes el Consejo de Ministros espera conocer "oficialmente" los cambios en el impuesto de Sociedades.

Los sindicatos podrían anunciar una nueva huelga general el 1 de mayo