jueves. 28.03.2024

En un comunicado que reproducimos íntegramente, los trabajadores de informativos de IB3 televisión acusan de desleal al Sindicato de Periodistas y de intereses creados el querer criticar continuamente a IB3 por parte de algunos periodistas y colectivos y piden que IB3 deje de ser el pimpampum de los políticos.

"Somos periodistas y trabajamos en la redacción de informativos de IB3 Televisión. Queremos manifestar que nos entristece profundamente que nuestra televisión, autonómica y pública, sea diana constante de los dardos, en forma de crítica sistemática, de algunos periodistas y otros colectivos. Respetamos su opinión pero, si nos permiten, vamos a darles la nuestra.

La mayoría de nosotros trabajamos en la empresa subcontratada para hacer los servicios informativos de la televisión autonómica, desde que ésta nació. Somos una redacción joven y preparada que intenta, día a día, dar lo mejor de sí para que la información llegue de la forma más rigurosa, concisa, clara, rápida y precisa al telespectador. Todo ello, recibiendo, sistemáticamente, críticas crueles de algunos, pocos, colegas del gremio. Es duro. Háganse a la idea, a través de un ejemplo:

Mallorca, durante la gran nevada del invierno pasado. Sábado, 4 de febrero: buena parte de la red viária de la isla amaneció cortada por la nieve o el hielo. A primera hora, muchos de nosotros nos presentamos, aunque por turno no nos tocara, en la redacción. Y los que no pudimos, porque vivimos en zonas que quedaron aisladas, nos pusimos a disposición de la tele por teléfono. Conscientes, todos, de la importancia y gravedad del fenómeno, de la noticia. Supimos que ese día nuestra tele debía ser muy rápida en dar información de servicio a la población, para evitar riesgos. Trabajamos, durante el fin de semana, en jornadas que superaron, de largo, las 12 horas. Todos. Voluntariamente. Mientras, algunos –una minoría, pero muy ruidosa- se mofaban, a través de las redes sociales, de nuestro trabajo. Afortunadamente nuestro termómetro es más rudimentario. Es en la calle, donde valoramos si llegamos o no al pueblo. Y esos días, IB3 televisión fue un referente porque llegó a todos y cada uno de los rincones de la isla en los que la nieve provocaba problemas; y los ciudadanos confiaron en IB3Notícies y así lo reflejan las audiencias del informativo del sábado 4 de febrero con una media de 28,1% (173.000 espectadores) con un minuto de oro (a las 14:29 del 41.2%). Fue el informativo más visto de la historia de IB3 Televisión. Ni el Twitter más ofensivo empaña el hecho.

Desde la redacción, lo que se intenta es pulsar el sentir de la calle. Hacer periodismo sin estar pendientes de las esferas políticas y proponer temas que reflejen el día a día de la gente corriente, sus alegrías, sus penas, sus logros, preocupaciones y problemas. Gente cuya voz difícilmente se escucharía en ningún otro canal, si nuestra tele no existiera. A veces friquis, sí, como les llama el Sindicat de Periodistes de les Illes Balears (SPIB) en un comunicado, pero personas que, como ciudadanos, también tienen derecho a la televisión pública.

Y defendemos la televisión pública hasta tal extremo que consideramos que incluso las televisiones privadas, al explotar una licencia que es pública, se deben a la sociedad y que, por tanto, deben de esforzarse en cuidar, por igual, los tres objetivos del medio: informar con rigor, formar y entretener.

Ya lo ven. No seremos nosotros quienes tiremos piedras contra la televisión. Ni contra la que nos da trabajo, ni contra ningún otro medio de comunicación. Un emotivo silencio inundó nuestra redacción cuando vimos en directo la última emisión de los informativos de Televisió de Mallorca. Al terminar, cuando emitieron un plano con todos sus trabajadores en el plató, en un acto espontáneo, nos pusimos a aplaudir con ellos. En homenaje.

Defendemos la labor de los informativos de la televisión frente a la reciente denuncia, hecha pública por el Sindicat de Periodistes de les Illes (SPIB), en nuestro nombre y sin contar con nosotros, con nuestra opinión o, por lo menos, la de una amplia mayoría de la redacción de la televisión.

No es fácil pilotar un barco que navega bajo tormenta permanente. Eso, los marineros de la tele, lo sabemos bien. Nekane Domblás, en la anterior legislatura, y Juan Mestre, en lo que llevamos de ésta, han demostrado ser patrones. Periodistas de raza, sinceros, cercanos, abiertos a la redacción, currantes, dialogantes y, prudentes. No es un puesto para kamikazes. Y, si algún día, alguno de nosotros no está de acuerdo con alguna decisión editorial relacionada con la información que tratamos lo dice, se habla e intentamos llegar a un acuerdo. No seríamos periodistas si calláramos por miedo. Luego, donde hay patrón no acostumbra a mandar el marinero y para eso hay editores que tienen la última palabra.

Pero hablemos claro: eso pasa en IB3, y en todos los medios de comunicación del mundo, en donde los trabajadores se estructuran siguiendo una jerarquía muy definida y desde cuya cúspide se marca la línea editorial. El capitán inteligente es el que sabe escuchar al grumete y grumete listo, el que sabe hacerse oír. Pero somos conscientes de que el equipo de dirección ha sido elegido por un determinado partido político. Destacar que así ha sucedido en cada una de las legislaturas que han pasado desde la creación del ente.

Lo que ocurra con IB3 en el futuro será responsabilidad de todos. Los trabajadores siempre estaremos del lado de defender la TV autonómica y resisitiremos todas las críticas, interesadas o no, pero una IB3 desprestigiada y valupeada no interesa a nadie. Creemos que IB3 debe ser la televisión de las Baleares, y no la del partido de turno. Será, en cualquier caso, lo que quieran los políticos. Su desprestigio no será ni gratuito ni inocente. IB3 debe dejar de ser el pimpampum de los políticos. Queremos una TV que cumpla su función constitucional y no un arma arrojadiza de la clase política.

La crítica siempre enriquece pero las campañas de desprestigio y linchamiento de uno y otro lado más que desgastar a los políticos, desgastan a IB3. Dejen la TV al margen de la disputa y consensúen un modelo integrador que defendamos entre todos. El Parlamento Balear debería estar a la altura de las circunstancias y defender IB3. Hemos de decidir si el modelo de Baleares es el de una televisión desprestigiada o una televisión creíble, respetada y de calidad.

Si IB3 se desprestigia o se desnaturaliza, las Islas Baleares perderán un activo. La responsabilidad es de todos. Cada uno que asuma la suya.

Creemos, queremos y trabajamos en y para un medio de comunicación llamado televisión. Con ella, lo reconocemos, no somos objetivos. Nos posicionamos a su lado y somos partidarios del debate, la crítica constructiva y la reflexión, si es para mejorarla, no para hundirla fomentando tempestades.

Terminamos y lo hacemos sabiendo que acabamos de incumplir una de las reglas básicas del periodismo televisivo: la tele no es la noticia, la tele debe cubrirla".

TRABAJADORES DE LOS INFORMATIVOS DE IB3 TELEVISIÓ

Trabajadores de IB3 TV defienden la labor de los informativos frente a la denuncia...