viernes. 29.03.2024

El GOB ha ido denunciando los recortes que se han realizado desde el Govern para el mantenimiento de los Parques Naturales de Baleares, los efectos de este recorte empiezan a hacerse evidentes. Uno de los servicios básicos de los espacios protegidos es su vigilancia para hacer cumplir la normativa de uso público.

S'Albufera de Mallorca es nuestro parque natural más consolidado, y con más relevancia internacional (inscrita coma zona húmeda de importancia internacional en el Convenio de Ramsar). Aún así, la vigilancia de este magnífico espacio natural se encuentra ahora bajo mínimos. El programa anual de ejecución del Parque por este año tiene previsto un equipo de vigilancia integrado por un Agente de Medio ambiente destinado al Parque, con el apoyo de otros agentes cuando sea necesario, y la contratación de 3 vigilantes de apoyo entre los meses de abril y octubre. De todo esto, a estas alturas prácticamente no hay nada denuncian desde el GOB: la dedicación de los Agentes de Medio ambiente está por debajo del previsto, y tampoco se cuenta con los vigilantes de refuerzo estival.

Esto provoca hechos impensables en una situación de “normalidad” en un espacio protegido. Así, el pasado domingo 17 de junio un adulto y un niño navegaban tranquilamente en piragüa por el canal Gran, en el corazón del Parque Natural, donde además de estar prohibido hacerlo se pone en riesgo, por molestias, la cría de la más importante colonia de garzas que hay en s'Albufera.

La vigilancia de s'Albufera, especialmente los fines de semana (que es cuando más falta hace) está muy por debajo de los mínimos aceptables. Así, otros usos problemáticos, como la pesca ilegal dentro del parque (practicada fundamentalmente por ciudadanos provenientes del este de Europa) no cuenta con la atención necesaria.

Desde el GOB observan con mucha preocupación la degradación en las condiciones de gestión que están sufriendo los espacios protegidos, mientras el Govern parece más preocupado en fomentar el uso masivo, mercantilizarlos y abrirlos a la iniciativa privada.

Practican piragüismo por la falta de vigilancia en S'Albufera de Mallorca