jueves. 28.03.2024

La Comisión Europea prevé que la economía española decrezca un 1,4% este año y un 1,4% adicional en 2013 -frente a la contracción del 0,5% que calcula el Gobierno- debido al aumento del paro, que llegará al 26,2% el año que viene; el desendeudamiento del sector privado; las medidas de ajuste presupuestario y la restricción del crédito.

Sólo en 2014 se producirá una "mejora gradual" de la economía, con un crecimiento del 0,8%. Pero el paro se mantendrá ese año en el 26,1%.

Además el Ejecutivo comunitario vaticina que España incumplirá los objetivos de reducción de déficit pactados con la UE los próximos tres años. El déficit se situará este año en el 8% del PIB -el 7% si se descuentan las ayudas a la banca-, lejos del objetivo del 6,3%. Para el año que viene, Bruselas calcula un déficit del 6% (en lugar del 4,5%), mientras que en 2014 volverá a subir hasta el 6,4% (en lugar del 2,8%) debido a que caduca la subida del IRPF.

Bruselas prevé de media una inflación del 2,5% este año, el 2,1% en 2013 y el 1,3% en 2014.

Más paro

"Hasta ahora, el ajuste en el empleo continúa llevándose a cabo a través de la reducción del número de trabajadores más que recortando las horas trabajadas", señala Bruselas. Además, "está afectando ahora al empleo fijo tanto como al temporal" y "a todas las ramas de actividad" y aumenta el paro de larga duración, que ya supone el 50%. La tasa de paro se situará de media en el 25,1% este año, en el 26,6% en 2013 y sólo bajará hasta el 26,1% en 2014.

Tanto el consumo privado como la inversión seguirán cayendo este año y el que viene debido al alto paro, las malas perspectivas económicas y el proceso de desendeudamiento.

Olli Rehn, vicepresidente de la Comisión y responsable de Asuntos Económicos y Monetarios y el Euro, ha declarado que "Europa está atravesando un difícil proceso de reequilibrio macroeconómico, que continuará durante cierto tiempo. Nuestras previsiones señalan una mejora gradual de las perspectivas de crecimiento en Europa a principios del próximo año. La adopción de decisiones políticas importantes ha sentado las bases para consolidar la confianza. Se ha reducido la tensión en los mercados, pero no podemos dormirnos en los laureles. Europa debe seguir combinando unas políticas presupuestarias saneadas y reformas estructurales para crear las condiciones para un crecimiento sostenible que haga bajar el paro desde las inaceptables tasas actuales".

Europa prevé para España una tasa de paro del 26% y que la economía decrezca un 1,4%