La expresidenta del Parlament y del Consell de Mallorca Maria Antònia Munar ha asegurado, en la declaración que ha prestado como imputada por la presunta financiación irregular de UM, que "nunca" ha tenido conocimiento de una supuesta entrega de dinero negro en las cuentas del desaparecido partido, cuestión de que en varias ocasiones ha aseverado "no saber nada".
Durante su comparecencia ante el titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Palma, Miquel Florit, Munar ha incidido en este sentido en que "nunca me comentaron que se pagaban cosas en B", apostillando no haber tenido nunca "fondos del partido", como tampoco, ha recalcado, "he llevado la administración de UM ni he tenido ninguna caja".
De hecho, la encausada, defendida por el abogado Gabriel Garcías, ha apuntado que era el expresidente de la formación Miquel Àngel Flaquer quien se ocupaba de la administración del partido y de las cuestiones económicas en las campañas electorales. "El responsable de administración presentaba cada año el presupuesto con el que contaba el partido, se comentaba en el comité ejecutivo y se llevaba al consejo político para su aprobación", ha precisado.
Así, en relación con los gastos electorales, ha manifestado que cree que éstos se declaraban ya que "el señor Flaquer era muy minucioso". Mientras tanto, en relación a la que era secretaria del grupo parlamentario de UM Rosario Martín, Munar ha manifestado que nunca le comentó nada de los ingresos reflejados en los documentos que le han sido exhibidos en relación a las investigaciones "ni hablamos de contabilidad alguna".
En cuanto al exconseller insular de UM Bartomeu Vicens, la histórica dirigente de la formación ha afirmado que no tenía funciones en la administración económica del partido, como tampoco las tenía su exsecretario general Damià Nicolau, quien también esta jornada ha comparecido en calidad de imputado.
Finalmente, Munar ha defendido que mientras fue presidenta del partido, cargo del que cesó a finales de 2007, "nadie acudió a ofrecer o buscar trabajo, al menos con mi conocimiento".
La exlíder 'uemita' ha comparecido ante el juez después de que entre ésta y la pasada semana hayan sido interrogados otros exaltos cargos como la exconsellera insular de Promoción Sociocultural Dolça Mulet, el de Hacienda Miquel Àngel Flaquer y la de Medio Ambiente Catalina Julve, así como el exvicepresidente del Consell Miquel Nadal, quienes han negado haber realizado aportaciones en negro al partido o haber cobrado comisiones por los contratos.
En concreto, sobre Munar pesan una condena de cinco años y medio de cárcel, recurrida ante el Tribunal Supremo, por el desvío de 240.000 euros a la productora que controlaba, junto a Nadal, a través de testaferros. Mientras tanto, la Fiscalía solicita para ella otros seis años de prisión por el caso Can Domenge -por la venta supuestamente irregular de estos terrenos por parte del Consell- al tiempo que también está siendo investigada en el caso Voltor.
COMISIONES DE ENTRE EL 3 Y EL 10 POR CIENTO
Según la querella de la Fiscalía Anticorrupción que dio inicio a este nuevo procedimiento, a la que tuvo acceso Europa Press, los exaltos cargos, puestos de común acuerdo, exigían comisiones supuestamente de entre el 3 y el 10 por ciento del importe de los contratos adjudicados a las distintas empresas que contrataban con la Administración pública.
Unas mercantiles que se veían obligadas al pago de este dinero a cambio de las cuales obtenían garantías de que iban a ser ellas las adjudicatarias de las contrataciones. Así, los querellados, por sí mismos o "con la influencia que tenían en las administraciones por su pertenencia a UM", lograban favorecer a estas mercantiles con contrataciones.
Según el escrito del Ministerio Público, también conseguían que la Administración abonase un precio superior al de mercado para que el pago de comisiones no perjudicase a los contratistas, al tiempo que idearon la gestión de los fondos que procedían de las dádivas o contraprestaciones ilegales, destinando parte de los mismos a UM.
