jueves. 28.03.2024

El Mallorca ha recibido su regalo navideño en Sevilla, al ganar al Betis de 1 gol a 2, tres puntos para acbar con la sequía de los últimos tres meses. Se decidió la victoria con un gol de penalti anotado por Javi Márquez, fue la jugada polémica del partido porque la falta se dio fuera del área y por tanto el penalti no existía.

Joaquín Caparrós despide el año fuera de los puestos de descenso y vuelve a ganar un partido tres meses después. El conjunto sevillano dejará el 2012 siendo uno de los equipos revelación de la temporada, pero con la nostalgia de quedarse cerca de los puestos que dan acceso a la Liga de Campeones. Por otro lado, el Mallorca sale reforzado después de haber roto una racha de 12 jornadas seguidas sin ganar.

La primera parte fue muy igualada, aunque el equipo bético se adelantó a los cinco minutos, tras una falta sacada por Beñat desde la banda izquierda que se paseó por el área, sin que nadie llegara a tocar el balón, y fue directamente al fondo de las mallas.

Aunque estuvo más cerca el segundo del Betis, el Mallorca reaccionó y en el minuto 30, Víctor Casadesús, hacía el empate tras un gran cabezazo ante el que Adrián no pudo hacer nada. Los sevillanos la tuvieron antes de irse al descanso, pero Nunes despejó en la línea tras un remate de Rubén Castro.

La segunda mitad empezó con polémica. El colegiado Undiano Mallenco pitó un penalti inexistente indicado por el linier, ya que, aunque era falta, se produjo fuera del área. Javi Márquez lo transformó por el centro de la portería, engañando al arquero andaluz, que te tiraba a la izquierda. De esta manera, los de Caparrós daban la vuelta al encuentro para poder llevarse tres puntos muy importantes.

Los de Pepe Mel lo intentaron hasta el final pero los mallorquines se encerraron atrás, gracias a una defensa muy seria, y sólo tiraron a puerta dos veces en todo el partido. El Betis cierra así el año con un mal sabor de boca en casa, ya que ha sumado cinco derrotas en nueve partidos.

Tres puntos de regalo navideño para el Mallorca