sábado. 20.04.2024

Rafa Nadal ha regresado tras dos años a entrar en la pista del Melbourne Park para disputar el Abierto de Australia. Nadal sólo estuvo 39 minutos en pista, al retirarse Bernard Tomic por lesión cuando Rafa le ganaba por 6-4 en el primer set, el zurdo agradeció volver a sentir el ambiente en Melbourne.

"Creo que siempre he jugado con mucha pasión, mucho amor por el deporte. El tiempo fuera no me entregó más pasión o amor, siempre lo he vivido con intensidad", explicó Nadal. "Pero es cierto que cuando estas un tiempo fuera de la competición, la parte mental está más fresca que nunca. Todo parece ser de alguna manera nuevo otra vez".

"Por un lado hay una mala sensación porque cuando vuelves siempre tienes problemas. Pero por otra es excelente, ¿no? Las sensaciones son fantásticas. Volver a jugar en estadios llenos, los mejores del mundo, es algo a lo que te acostumbras. Cuando estás fuera lo extrañas y lo aprecias más cuando vuelves".

A pesar del rápido trámite y la poca acción, el No.1 del mundo, que el jueves se enfrentará a Thanasi Kokkinakis en segunda ronda, no cambiará el plan que tenía previsto. "Seguiré entrenando. He practicado bien durante la semana. Ya hice todo lo que tenía que hacer para llegar en buena forma. Sólo puedo esperar que las cosas salgan bien y encuentre el ritmo y las sensaciones correctas en una cancha complicada".

"Mañana entrenaré normal, como lo hago en días libres entre partidos: probablemente una hora, una hora y cuarto. Mañana volverá a hacer mucho calor, por lo que es bueno guardar algo de energía".

El foco de atención en Melbourne no sólo ha estado en los jugadores sino también en los entrenadores, con la presencia de Stefan Edberg y Boris Becker, entre otros, como nuevos compañeros de trabajo de algunas de las súper estrellas, pero el mallorquín se desmarca de la tendencia.

"Estoy pensando en McEnroe", dijo Nadal entre risas. "No, en serio, yo creo en la continuidad del trabajo, por lo que mi equipo es el mismo desde que empecé. Nunca he despedido a nadie en toda mi carrera. Eso me pone orgulloso".

"Siempre he creído que si juegas bien o mal es tu culpa, no del entrenador. Pero no digo que siempre. Cuando llega algo nuevo a veces ayuda escuchar cosas nuevas. Pero mi sensación es que cuando he ganando es porque estoy jugando con la actitud correcta y sé que mi equipo es el correcto. Cuando pierdo siento lo mismo".

"Toni (Nadal) conoce muy bien mi tenis, mi personalidad. Sabe qué decirme en momentos importantes, cuando estoy bajo presión, asustado, con confianza. Nadie me conoce mejor que mi equipo, porque estoy con ellos hace mucho tiempo. "Me siento confiado con ellos. Me encantaría terminar mi carrera con ellos. Voy a luchar por eso".

Nadal agradeció volver a sentir el ambiente del tenis en Melbourne