jueves. 28.03.2024

Oceana muestra su preocupación por la deficiente información en el ámbito marino de los borradores iniciales de los planes de gestión de seis Lugares de Importancia Comunitaria (LIC), incluidos Cabrera y Dragonera, que se están elaborando en la actualidad. Estos LIC forman parte de la Red Natura 2000, una red europea de áreas protegidas tanto terrestres como marinas, donde se encuentran diferentes hábitats y especies de interés comunitario.

Oceana ha detectado graves errores en el listado de las especies y los hábitats marinos. No solo por el hecho de omitirlos en algunos casos, sino porque la información que se ofrece de su distribución, características, amenazas y presiones o estado de conservación, entre otros, es errónea, está desactualizada y/o no tiene en cuenta las particularidades del LIC.

“La mayoría de los hábitats y especies se evalúan como en estado “Excelente”, pero no se entiende cómo se ha llegado a esa conclusión, ya que no se justifica y hay estudios y expertos consultados que demuestran lo contrario”, apunta Xavier Pastor, director ejecutivo de Oceana en Europa. “Esta valoración resulta peligrosa, ya que puede abrir la puerta a no aplicar las medidas de gestión oportunas allí donde se necesitan”.

 

Se han encontrado errores como que la tortuga boba se encuentra amenazada en sus playas de puesta, siendo esta tortuga una especie que no cría en Baleares. También se contempla que ciertas praderas de posidonia han aumentado su superficie de 0 a un 100% en un solo año, siendo este incremento imposible ya que se trata de una especie de crecimiento muy lento que apenas crece un centímetro al año.

“Todas estas carencias hacen entrever que estos documentos no se han realizado con el rigor que requiere un trabajo de estas características. Por lo tanto, consideramos que se deberían replantear todos los planes de gestión, destinando los recursos necesarios y teniendo en cuenta el conocimiento de los expertos de las diferentes especies y hábitats de cada LIC, con la finalidad de que estos cuenten con la gestión que se merecen”, concluye Pastor.

Los planes de gestión que se están elaborando en la actualidad determinarán el estado de conservación de los valores ambientales de estos LIC durante seis años. Por ello, es esencia que se cuente con una información de base adecuada.

Todos estos LIC fueron declarados en 2006 y había un plazo fijado por la UE de 6 años –es decir, hasta 2012– para elaborar sus planes de gestión correspondientes. Actualmente hay un retraso de dos años en el cumplimiento de estos plazos, por lo que existe el riesgo que la UE multe por ello.

Oceana detecta deficiencias en los planes de gestión de 6 áreas marinas protegidas en...