viernes. 19.04.2024

Més per Palma insta al equipo de gobierno de Palma a retirar la Ordenanza Cívica aprobada el pasado mes de mayo por que los objetivos defendidos por el PP están quedando en evidencia. La concejal ecosobiranista Neus Truyol afirma que "con otras normativas, ya vigentes, las principales actividades in-cívicas que se quieren perseguir ya se podían sancionar. Por lo tanto la utilidad de la ordenanza ha estado en entredicho desde el principio de su presentación".

Para Més las últimas operaciones contra el botellón o la prostitución en la zona especialmente conflictiva de la Playa de Palma se podían haber llevado a cabo con anterioridad a la ordenanza porque ya hay otras normas que lo sancionan. "Las únicas novedades introducidas por la Ordenanza de In-civismo son la confusión y arbitrariedad en su aplicación. Desde su aprobación, el PP y el concejal que lo ha impulsado, Álvaro Gijón han dado muchas fechas, plazos y zonas de información y aplicación que sólo han servido para desorientar a la ciudadanía y los agentes de la Policía Local".

El grupo Més en el Ayuntamiento de Palma considera que existe el peligro de que esta ordenanza, que es de difícil aplicación en su totalidad, sea utilizada por el gobierno "a la carta", según la calle o época del año a aplicar unas sanciones u otras. "Esto es un despropósito y una vergüenza! Que retiren la ordenanza es lo mejor que pueden hacer! Si no saben gobernar y dar soluciones, que se retiren y ya lo haremos los demás. Si no la retiran, dentro de un año la retiraremos nosotros", afirma Truyol.

Un calendario de aplicación claro

En este sentido, el grupo Més ya ha solicitado por escrito la información detallada del calendario de aplicación y la zonificación. "Hasta ahora hemos visto una total y absoluta improvisación del regidor Gijón, que cada semana ha ido anunciado una nueva zona de aplicación. Primero anunció que durante el verano se aplicaría a la Playa de Palma. Semanas después, afirmó que en el Centro de Ciutat también y se empezará a sancionar a actividades relacionadas con las bicicletas, los excrementos de los perros, etcétera".

La concejal de Més afirma que "el PP demuestra que no tiene palabra porque dice que la ordenanza es la solución a los problemas de la Ciudad, pero realmente genera más inseguridad e incertidumbre. Una misma sanción puede ser aplicable o no según el barrio donde nos encontramos. Si estamos en el Centro nos podrán multar por jugar a la pelota, pero si estamos en Son Cladera no? O si repartimos folletos informativos nos multarán, pero si pintamos un grafiti no? El PP juega a generar incertidumbre y miedo, a mantener la autocensura activa para reprimir el comportamiento de la gente".

Truyol asegura que esta norma ha sido "la tapadera para aprobar unas sanciones que persiguen la libertad de expresión y manifestación, secuestran la actividad en la calle y la supeditan a los conceptos moralistas del la derecha más puritana. Es una ordenanza represora y su aplicación comienza de la forma más errática posible, con improvisación y con un protagonismo total de la policía ".

Més per Palma advierte sobre la utilización "a la carta" de la Ordenanza Cívica