jueves. 28.03.2024

El juez instructor del caso Palma Arena, José Castro, ha citado a declarar entre el 6 y el 7 de octubre a un total de 17 testigos en relación a la presunta contratación 'a dedo' del arquitecto Santiago Calatrava, por 1,2 millones de euros públicos, para la elaboración del anteproyecto de una Ópera de Palma que nunca llegó a ser construida.

Mediante una providencia dictada este jueves, el magistrado ha oficiado asimismo al Cuerpo Nacional de Policía para que investigue la localización del almacén donde supuestamente fue depositada una segunda maqueta de la Ópera elaborada por el ingeniero valenciano. Se trata de unas diligencias que ha acordado a petición de la Fiscalía Anticorrupción.

Entre los testigos se encuentran numerosos proveedores que intervinieron en la preparación del proyecto para la construcción del edificio, a quienes el juez requerirá la documentación relativa a las facturas que cargaron al Govern por su trabajo.

También han sido emplazados a declarar la que fuera secretaria general técnica de la Conselleria de Vicepresidencia en la última legislatura de Jaume Matas (2003-2007), y el exconseller de la Generalitat Valenciana y director del estudio de Calatrava, Fernando Villalonga.

Del mismo modo, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 ha requerido al Instituto Balear de Infraestructuras y Servicios Educativos y Culturales (Ibisec) -el órgano dependiente del Govern que se encargó de tramitar la contratación de Calatrava- para que certifique si en sus archivos obra el trabajo desarrollado por Calatrava en virtud del convenio firmado el 27 de abril de 2007 para la ejecución del anteproyecto.

El pasado mes de julio, Castro archivó las pesquisas tanto para Calatrava como para Francesc Fiol, conseller de Educación y Cultura bajo el mandato de Matas, mientras que acordó mantener el encausamiento del expresidente del Govern.

Según Calatrava, Matas fue la persona que solicitó sus servicios para realizar un desarrollo inicial de la remodelación del Moll Vell que culminase con el levantamiento de un teatro de la Ópera, lo que fue perfilándose en varias reuniones de trabajo en la sede del Ejecutivo autonómico, en las que estuvieron presentes tanto Matas como el arquitecto y su equipo.

El ingeniero valenciano negó en su día que el anterior Govern del PP le favoreciese de forma irregular al adjudicarle, por encargo de Matas, la elaboración del anteproyecto, al tiempo que rechazó tajante haber pagado comisiones por recibir este encargo.

FIANZA CIVIL DE 1,6 MILLONES DE EUROS PARA MATAS

En cuanto a Matas, Castro decretó contra él una fianza de responsabilidad civil de 1,6 millones de euros a petición de la Fiscalía Anticorrupción ante los posibles perjuicios económicos que se derivaron de la contratación de Calatrava. Las acusaciones apuntan a que el exministro habría incurrido en delitos de malversación de caudales públicos, fraude y prevaricación.

Sin embargo, la defensa de Matas negó que su patrocinado hubiera cometido delito alguno en la adjudicación del anteproyecto y tachó de "infundios" las acusaciones de la Fiscalía y de la letrada de la Comunidad Autónoma. Además estimaba la petición "no ajustada a hechos ni a derecho", dado que "se apoya en indicios incriminatorios, que no son tales, sino sólo sospechas o conjeturas que en modo alguno pueden legitimar un procedimiento penal" contra él.

CASTRO: "SE DA POR SUPUESTO QUE MATAS NO DESCENDIÓ A PIE DE OBRA"

Frente a ello, Castro manifestó en su auto que "se da por supuesto que no descendió a pie de obra, faltaría más, pero existen sobrados indicios de que marcó las directrices" a fin de disponer de los servicios del ingeniero.

Tanto es así que, según el instructor del caso Palma Arena, el exjefe del Ejecutivo autonómico dio instrucciones para que se ultimara la tramitación del expediente de contratación "a costa de lo que fuera, incluida la falta de respeto a la Ley y a la realidad, al sólo objeto de que se resolviera a favor de la persona ya decidida y para que ésta fuera electoralmente utilizada sin importarle que el erario público pagara por ello".

El juez insistía además en que los términos de la contratación de Calatrava ya estaban decididos antes de que se materializase, según se desprende de la declaración vertida por los demás imputados de esta pieza de la causa.

EL EXPRESIDENTE ASUMIÓ SU RESPONSABILIDAD SOBRE LA CONTRATACIÓN

Mientras tanto, el propio Matas, durante la declaración que prestó ante el juez en febrero de 2011 en calidad de imputado, asumió su responsabilidad sobre la elección del arquitecto valenciano para que realizase el anteproyecto si bien defendió la legalidad de su contratación, que se efectuó de forma directa y sin concurso pese a lo elevado de la cantidad que se le abonó.

En su comparecencia, el encausado del caso defendió que su decisión fue "política" y "plenamente legítima", que después fue elevada al Consell de Govern, y justificó la selección y contratación sin ningún concurso previo por ser una persona "muy cualificada técnica y artísticamente". En este sentido, incidió en varias ocasiones en que la pretensión del Govern balear era contar únicamente con los servicios del prestigioso arquitecto e ingeniero.

Cabe recordar que el anteproyecto de la ópera de Palma no se llegó a ejecutar debido a una prohibición por parte de la Junta Electoral en 2007, puesto que se pretendía presentar poco antes de las elecciones autonómicas y municipales de ese año.

Castro cita a 17 testigos por la adjudicación de la Ópera de Calatrava