jueves. 28.03.2024

Un 25 de noviembre de hace 452 años nacía en Madrid Félix Lope de Vega y Carpio, uno de los más importantes dramaturgos del Siglo de Oro español.

Tras más de un año de gira por toda España, la compañía madrileña Factoría Teatro desembarca en Palma con una divertidísima obra de Lope que hará las delicias de jóvenes y adultos.

El Festival de Almagro, la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid, el programa Madrid Activa, así como los alumnos de centenares de institutos, desde Galicia a Andalucía, han aplaudido esta puesta en escena de la directora y dramaturga Gonzala Martín Scherman.

Las funciones tendrán lugar el viernes 28 de noviembre a las 21h00

y el sábado 29 de noviembrea las 19h00 en la Sala Dante.

Un cuarteto de osados intérpretes se atreve con esta partitura barroca de enredos, confusiones, disfraces, intrigas, argucias, berenjenales y empanadas donde la locura de los personajes y la diversión del público conforman una alegre melodía. Esta música resuena en el Madrid del siglo XVII, entre la Calle de los jardines y El Prado, escenario recurrente en las comedias de nuestro Fénix de los Ingenios, Lope de Vega.

¿Y quién es la artífice de todo este disparate? Fenisa, una mujer joven y bella que por nada de este mundo quiere quedarse para vestir santos y busca por todos los medios librarse de la vigilancia y del yugo maternos. Quiere salir, ser vista, ser amada y requebrada y, cómo no, quiere casarse, única manera de escapar de Belisa, su madre.

En su fugaz paseo de misa a casa ve a un lindo joven de quien se prenda perdidamente. Se trata de Lucindo, su posible libertador. Y hete aquí, casualidades de la vida, que el padre del mozo, el capitán Bernardo, viene a casa de las damas para pedir la mano… ¿Para su hijo casadero? No ¿Para la madre viuda que le mira bien? Tampoco. Es para él, militar viudo y arcaico, para quien quiere la hermosura de Fenisa. A partir de aquí, apenas empezada la obra, se precipita la acción y es nuestra heroína quien, con ingenio y discreción, maquina una intriga tras otra para sortear cada nueva sorpresa o revés de la fortuna. Una fortuna mundana que incluye a Gerarda, cortesana deseada por Lucindo, al delicado Doristeo, fiel pretendiente de Gerarda y, cómo no, al criado comentarista y mediador, Hernando.

El amor está muy lejos de ser el único motor de esta imposible maquinaria. El deseo mueve todos los engranajes: un deseo intensísimo del otro, un deseo amoroso, sensual, un deseo de libertad, de conseguir cada uno sus propósitos. Y nosotros también participamos de ese deseo de compartir de cerca con el público una comedia de enredo que asombra y divierte por la fluidez de su urdimbre, por la gracia del texto, lo disparatado de las situaciones, y en fin, por ser una pieza barroca con una melodía muy particular que hemos afinado en “clave de Factoría” para su deleite.

La discreta enamorada en la Sala Dante