jueves. 28.03.2024

La vida dolça cuenta la historia de Miquel, un panadero artesano de barrio, que anuncia el cierre de un establecimiento centenario, un símbolo para el barrio, para Palma y todo Mallorca. Ubicado en el casco antiguo de la ciudad, es uno de los últimos comercios tradicionales supervivientes en una barriada antes viva y tejida de un entramado comercial. Es la historia de Miquel Pujol, en Miquel del Forn de sa Pelleteria.

Con más de 49 años de trabajo, dedicó toda la vida, en cuerpo y alma, a repartir alegría y crear instantes de felicidad a través de sus dulces. Centenares de turistas y vecinos han disfrutado de sus golosinas, e incluso clientes de renombre, como el artista Miquel Barceló, los cantantes Maria del Mar Bonet y Joan Manel Serrat.

La vida dolça es una producción financiada gracias a las aportaciones de más de 200 mecenas con el sistema crowdfunding, y con la participación de IB3 Televisión, Singular Audiovisual y el apoyo de Tomavistes.

Dos años después de la realización del documental, Miquel Pujol murió, el 18 de febrero del 2014, pero su huella continúa latente. Se ha hecho un caparrot en su honor, se ha colocado una placa conmemorativa en la fachada de su horno y sus hijos han abierto un horno con el nombre de "La vida dolça".

Desde el equipo de “La vida dolça” lamentan que en Baleares,  no podemos celebrar y disfrutar juntos la emisión del documental puesto que las emisiones del canal 33 han sido cortadas desde hace unas semanas para el territorio de las islas Baleares. El documental se podrá seguir por Internet en streaming a partir de las 23:30h.

El documental mallorquín La vida dolça se emite en el Canal 33