viernes. 29.03.2024

Tejeiro apunta que Aizoon contrató a numerosos empleados ficticios

El excontable del Instituto Nóos Marco Antonio Tejeiro ha subrayado que Aizoon, la empresa cuya propiedad comparten al 50 por ciento la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, defraudó a la Seguridad Social, al Inem y a Hacienda al simular la actividad de Aizoon justificando, mediante la contratación de numerosos empleados ficticios -entre ellos tres sobrinos del exduque y varios empleados domésticos del matrimonio- los ingresos que de forma irregular obtuvo esta sociedad 'pantalla'.

En su declaración como acusado en el juicio que se celebra en Palma por el caso Nóos y que se ha reanudado este viernes, Tejeiro ha subrayado que tan sólo dos de los empleados de Aizoon eran reales mientras que el resto, eran trabajadores "ficticios" que, pese a estar dados de alta en la Seguridad Social, no llevaban a cabo ningún tipo de actividad para la mercantil, todo ello con el objetivo además de aumentar los gastos deducibles así como la disminución de la base imponible en el Impuesto de Sociedades.

Entre el personal de Aizoon se encontraban varios empleados del servicio doméstico del palacete que Urdangarin y su mujer poseen en el barrio barcelonés de Pedralbes, además de una estudiante, una encuestadora, un asesor, dos personas que "nunca nadie ha visto trabajar" para la empresa, un "chico de los recados", una analista del estilo de vida de los deportistas y una persona con estudios de enfermería haciendo "cortas y pegas" de artículos de Internet, tal y como sostiene la Fiscalía Anticorrupción.

También fueron contratados de forma ficticia los sobrinos de Urdangarin Jan, Lucas y Lucía Gui, además de otros empleados del hogar que trabajaban en la vivienda de la que fuera asistenta personal del exduque, Julita Cuquerella.

El fiscal Pedro Horrach le está exhibiendo de forma exhaustiva diversos documentos en relación a estas contrataciones así como diversos correos, con Tejeiro como remitente o destinatario, en los que se abordan estas presuntas irregularidades.

La empresa de la Infanta y Urdangarin defraudó a la Seguridad Social, al Inem y a Hacienda