27 de febrero de 2016, 17:27
Las inclemencias meteorológicas han obligado finalmente a suspender el partido que esta tarde debían disputar a partir de las seis el Huesca y el Real Mallorca. La nieve y la mucha lluvia caída sobre el estadio han llevado al árbitro a adoptar esta decisión, que se presumía ya durante toda la mañana por el pésimo estado en que ha quedado el terreno de juego.