viernes. 19.04.2024

Cada 22 de abril, desde el año 1970, se celebra el Día de la Tierra en todos los países y rincones del planeta

El futuro de la Tierra y del bienestar básico para las personas depende única y exclusivamente del ser humano

El senador demócrata estadounidense Gaylord Nelson fue el impulsor del Día de la Tierra, y trabajó para concienciar a la población de la importancia de respetar el medio ambiente e informar sobre los problemas de sostenibilidad a los que se enfrentaba el ser humano, entre los cuales destacaba contaminación o la contaminación. n ser humano responsable directo de los grandes males a los que se enfrenta el planeta azul.

Nelson promovió en 1970 una manifestación en la que se pedía la creación inmediata de una agencia medioambiental que velara por la conservación del planeta. Estudiantes procedentes de más de 2000 universidades y de 10.000 institutos de todo Estados Unidos participaron de ella, a los que se sumaron multitud de comunidades defensoras de la naturaleza. Así se gestó el Día de la Tierra.

Las protestas consiguieron su objetivo y el gobierno estadounidense del republicano Richard Nixon aprobó la creación de la Environmental Protection Agency (Agencia de Protección Ambiental), una institución que todavía permanece en activo tras casi 50 años de actividad.

¿Por qué el 22 de abril?

Gaylord Nelson era consciente de que el éxito de su convocatoria para el Día de la Tierra dependía directamente del calendario de estudios estadounidense, por lo que apostó por esa época del año ya que no coincidía ni con exámenes ni vacaciones.

DERECHO A RESPIRAR UN AIRE LIMPIO

Hoy en día, nuestra civilización infringe sistemáticamente un derecho que, aunque no aparece como tal en el texto, sí lo es para los seres humanos, la calidad del aire que respiramos. Un atentando a los ciudadanos que no responde a riqueza, raza o religión. Por ejemplo, China, una de las mayores potencias del mundo, afronta un reto mayor que avanzar en las desigualdades sociales o la falta de libertades: combatir la nube atmosférica que cubre el país, que deja cada año cerca de un millón de muertes.

Esta situación se repite en las grandes ciudades del planeta y no es de fácil solución. Los gobiernos de ciudades como París, Madrid o Barcelona han creado una iniciativa en change.org contra la industria del automóvil, el principal causante de este problema. Los líderes locales critican además que la Unión Europea sancione a los ayuntamientos la mala gestión del aire al mismo tiempo que permite que los fabricantes de coches puedan infringir los límites de emisiones.

El Día de la Tierra reivindica una mayor conciencia medioambiental