jueves. 28.03.2024
Cabras asilvestradas
Cabras asilvestradas

El descaste de cabras alóctonas en Calvià ha vuelto a poner en el candelero un tema que cada año resurge de sus propias cenizas. El Ayuntamiento ha explicado que las actuaciones que se han llevado a cabo en la finca pública de Galatzó, para controlar la población de cabras alóctonas, responde a la intención del Consistorio de recuperar el uso tradicional de la finca.

"Existe un problema reconocido de proliferación de cabras alóctonas asilvestradas en toda la Sierra de Tramuntana y sus efectos son devastadores sobre el ecosistema".

En este sentido, ha informado que "por razones de custodia del territorio" el área de Bienestar Animal del Ayuntamiento tuvo que intervenir y solicitar una actuación para preservar el ecosistema de la finca.

Sobrepoblación

Hace décadas que Mallorca tiene una sobrepoblación de 14.000 cabras salvajes, pese a que cada año se elimina, aproximadamente, el 50 por ciento. No tienen depredadores, no permiten la reforestación y ponen en peligro diferentes ecosistemas, lo que va en detrimento de especies y subespecies tanto de flora como de fauna.

Cuando hay escasez de alimento o agua invaden cultivos, pueblos y calzadas, pero se sigue manteniendo un intenso debate entre cazadores y técnicos, y los que quieren mantenerlas y los que no.

Si habláramos (y sin querer hacer de menos a estos rumiantes) de ratas, topillos, gaviotas, cucarachas, procesionaria o la tan nombrada Xileya Fastidiosa, también fauna que ataca flora y ecosistemas, igual no se elevaba el debate al nivel del ‘racismo, los inmigrantes o los toros’, como se puede leer en las redes sociales.

Para convivir en paz con las colonias de gatos, se controlan se esterilizan y se vacunan, los voluntarios los alimentan y han dejado de ser la amenaza que fueron, como en las reservas. En la Serra y con las cabras, es bastante difícil hacer algo así.

También se controla el crecimiento de las piaras de cerdos salvajes cuando pierden a su pastor, porque ya nadie quiere pastorear ni pasar las privaciones de las profesiones ancestrales. Y eso que en Mallorca no hay jabalí, pero nuestros cerdos no tienen nada que envidiarles. Son igual de peligrosos e igual de destructivos si no encuentran comida o si se ven amenazados.

Bartomeu Seguí, doctor en Zoología y jefe de servicio de Caza del Consell de Mallorca, lleva años insistiendo en que “en la Serra existe una verdadera sobrepoblación de cabras. La Oficina de la Caza del Consell defiende el descastamiento (eliminación selectiva) de las cabras impuras para mantener el cabrito autóctono".

El problema con las cabras se ha generado a raíz del abandono de las zonas de cultivo y de la gestión de las fincas agrarias. Pep Lluís Gradaille, director del Jardí Botànic de Sóller, siempre ha mantenido que “Estamos totalmente en contra de las cabras que devastan plantas endémicas únicas en el mundo y que tienen un valor patrimonial muy importante. No podemos olvidar que la cabra es una especie introducida".

El uso tradicional de Galatzó

"Cuando en una especie invasora su población aumenta de forma descontrolada, se producen atentados contra el ecosistema poniendo en peligro otras especies y es por este motivo que se vio en la obligación de realizar esta actuación", han defendido desde el Ayuntamiento de Calvià.

El Consistorio ha explicado que, una de las primeras actuaciones que se llevaron a cabo, fue retirar el coto de caza que existía en las legislaturas anteriores.

Asimismo, han destacado que se ha destinado a Bienestar Animal una partida de 4.000 euros, se ha aprobado una ordenanza que regula los animales que viven en el entorno humano, se ha mejorado la gestión de la perrera municipal y se han firmado convenios con entidades animalistas.

Continúa la polémica por el rescaste de cabras en Galatzó