viernes. 29.03.2024

El inicio del Puente de mayo estará pasado por agua debido al probable acercamiento de una pequeña borrasca al suroeste peninsular el viernes 28 de abril y el sábado 29 aunque, con el paso de los días, se producirá una gradual disminución de la inestabilidad que dará paso a una paulatina disminución de la nubosidad, las precipitaciones y a un ascenso de las temperaturas diurnas, según la predicción especial de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

De este modo, la situación atmosférica del 28 y 29 de abril estará determinada por el "muy probable acercamiento de una pequeña borrasca al suroeste peninsular" por lo que la incertidumbre de estos días está asociada a la posición exacta de la baja, ya que unos escenarios la acercan más que otros.

En todo caso, la AEMET ve "muy probable" su presencia en el entorno del sur de Portugal. Esta baja inducirá un flujo de aire de componente sur, cálido, húmedo e inestable, que progresivamente reemplazará al aire frío y seco instalado en la Península y Baleares durante los días anteriores, que va a provocar un descenso de las temperaturas de hasta 15ºC.

Como consecuencia, el viernes comenzarán a producirse chubascos y tormentas, posiblemente fuertes, en el suroeste peninsular y que el sábado se extenderán a buena parte de la fachada atlántica y, con menor probabilidad, al resto del área peninsular. Otra consecuencia será el ascenso notable de las temperaturas, excepto las mínimas del viernes, que incluso aún bajarán más, con numerosas heladas en zonas altas de la mitad norte peninsular y en la meseta norte.

En cuanto a las islas Canarias, se verán afectadas por el paso de un frente frío poco activo que producirá precipitaciones más probables en las islas occidentales. El viento de componente oeste no será fuerte y originará un ligero descenso de las temperaturas.

Para el domingo 30 de abril, es probable que otra borrasca, más profunda y con un frente frío asociado, recorra la Península de oeste a este. Este escenario principal tiene aproximadamente un 70% de probabilidad y daría lugar a lluvias generalizadas en las vertientes atlántica y cantábrica, que serán menos probables en la mediterránea.

Otras opciones minoritarias muestran la borrasca más lejos, con un frente menos activo o también una continuación del tiempo inestable de los días anteriores. El viento de componente oeste originará pocos cambios en las temperaturas, salvo en el área Mediterránea, donde subirán claramente. En Canarias, se prevé un flujo de componente norte que producirá nubosidad abundante y posibles lluvias débiles en el norte del archipiélago. Las temperaturas continuarán descendiendo.

Al inicio de mayo, el 1 y 2 de mayo, se espera una gradual disminución de la inestabilidad que implica la desaparición de la nubosidad y de las precipitaciones y una subida de las temperaturas diurnas.

En cualquier caso, la AEMET puntualiza que el lunes con un 40% y el martes con un 20% de probabilidad, se puede mantener la situación de inestabilidad del domingo mientras que en Canarias es muy probable que se establezca una situación de alisios flojos.

El Puente de mayo vendrá pasado por agua pero se despedirá con sol y calor