jueves. 28.03.2024
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El Ayuntamiento de Palma tiene su propia ecotasa. Desde la instalación de las zonas de accesos de circulación restringida (ACIRE) que afecta a numerosas calles del centro histórico de Palma, las multas han experimentado una recaudación récord este año.

Aunque en no todas las zonas Acire se multa, al menos por el momento, puesto que Cort ha instalado señalizaciones de Acire en diversas calles de la barriada de s'Hostalet, en las cercanías de los colegios Santa Isabel y Santa Mónica y no las han dotado de cámaras de control con lo que los vehículos circulan por estas calles libremente y sin tener en consideración esta zona restringida a la circulación rodada.

Esta zona Acire se inicia en la calle Son Ventalloll esquina con la calle Nunó Sans, en las cercanías del CEIP de Santa Iabel y el colegio concertado Santa Mónica. La zona restringida afecta a varias vías hasta las calle Bujosa y finaliza en la calle Caballero D'asphelt.

La zona cuenta, exclusivamente, con una señalización de zona Acire en la Nunó Sans, sin que se aprecie ningún mecanismo de control como puedan ser cámaras en los accesos o intercomunicadores, tal y como así se constatan en las difererentes zonas Acire instaladas por el Ayuntamiento de Palma. Esta situación provoca que en las horas punta de entrada y salida de los colegios, los vehículos circulen sin hacer el menor caso a la zona restringida, sean o no residentes en la zona.

Desde el grupo municipal de Ciudadanos en el consistorio palmesano se ha solicitado que, ya que se ha instalado esta zona Acire, se la dote de los medios de control necesarios para restringir la circulación rodada, solicitud que ha sido aprobada por el consistorio palmesano aunque no se espera que se haga efectiva en estos momentos pues coincidiría con el final del curso escolar, lo que conllevaría serios problemas circulatorios.

Cort instala en s'Hostalets una zona Acire sin capacidad de control