martes. 19.03.2024

Alcohol

Esta es la palabra de la discordia, del desorden, de la mala imagen turística de una reducida parte de Mallorca. Esta es la clave para, en buena parte controlar el desorden terrible que se produce en lugares muy concretos de nuestra geografía con un turismo que busca en el destino la borrachera y el desfase por encima de todo.

¿Qué hacemos para frenar esto? Pues lo primero de todo, atacar al pequeño comercio prohibiéndole exhibir en las terrazas comerciales las bebidas alcohólicas que vende. La cuestión no revestiría polémica, incluso desde el pequeño comercio se estaría de acuerdo si fuera una medida más de las muchas que se tomasen para poner fin a este turista conflictivo de bajo poder adquisitivo.

Y razono mi consideración. La mayoría de los ingresos hospitalarios (71%) de abusos en el consumo de alcohol en Son Espases, proceden de los hoteles con régimen de todo incluido. Otra parte más pequeña llegan de establecimientos de ocio y los que se pasan comprando el alcohol en comercios es irrisoria (2%)

Por lo tanto, que nadie se sorprenda si las medidas coercitivas contra el pequeño comercio no dan resultado alguno en este sentido.

Desafortunadamente encontramos a faltar un planteamiento global. ¿Por qué no se actúa decididamente contra los locales nocturnos? ¿Por qué no se es más estricto con los hoteleros y se elimina el alcohol del todo incluido? Esto si que funcionaria de verdad.

Estas son preguntas que alguien tendrá que contestar. Mientras tanto quiero, deseo y reclamo que las instituciones, todas en conjunto, los empresarios comerciales, los hoteleros y los touroperadores nos pongamos de acuerdo para tomar decisiones contundentes.

Si esto no se produce no nos sorprendamos después si en mayo o junio del próximo año volvemos a las andadas.

Alcohol