jueves. 28.03.2024

Este jueves, representantes de varias comunidades autónomas se reunirán en el ministerio de Trabajo para empezar a abordar  la posibilidad de buscar soluciones que permitan anticipar la jubilación  a los empleados del sector de la hostelería, una demanda mil veces solicitada por los sindicatos y que siempre ha sido denegada por el Estado.

Baleares acoge a miles de trabajadores cuyo notable esfuerzo físico requiere una regulación y adaptación laboral a la hora de compensar los actuales periodos de jubilación existentes. Desde UGT se considera que  “la negociación será muy difícil, pero no imposible”.

El secretario de Acción Sindical de la Federación  de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT en Baleares, José García, quiere incidir en el hecho de que durante la reunión  se va a tratar la jubilación de los empleados fijos y los discontinuos, aunque preocupa mucho el encontrar vías para buscar soluciones definitivas para los fijos discontinuos.

“En la actualidad, la Seguridad Social deniega a los fijos discontinuos el derecho a jubilarse parcialmente, tal y como así lo hacen los fijos pues la Seguridad Social interpreta la ley a su manera”, dice José García, que incide en que “lo que proponemos los sindicatos es que a partir de los 61 años y 6 meses estos empleados puedan jubilarse y la empresa  los sustituya por nuevos trabajadores. Con ello, la Seguridad Social no perdería cotizantes y además se crearían empleos”.

En cuanto a los fijos discontinuos “proponemos lo mismo que  a los fijos. El problema que tiene este colectivo es que existen periodos en los que no trabajan, lo que les afecta de una forma muy importante en la cotización. Al penalizarse, al final repercute en el conjunto de su cotización”.

En cuanto a la jubilación anticipada en el sector, en que actualmente se exige una edad mínima de 63 años y 35 años trabajados,  “la ley contempla que por cada año que te jubiles con anterioridad, se te descuenta entre un 6% y un 8%  de la pensión máxima que te corresponde”, señala José García quien añade que “queremos que la Seguridad Social no penalice a estos trabajadores, para que puedan cobrar el máximo de jubilación,  jubilación que ya de por sí no es muy cuantiosa”.

García tampoco olvida la necesidad de que el Estado  asuma el problema de definir lo que son las enfermedades profesionales en hostelería “puesto que  dentro de sector se incluyen muy pocas enfermedades como profesionales pues la mayoría se catalogan como comunes cuando debido a la altísima carga de trabajo existente deberían catalogarse como profesionales”.

Los sindicatos exigen equiparar la jubilación anticipada de los fijos discontinuos