jueves. 28.03.2024

Un ejemplo de como no se debe gestionar la administración de Calvià

Esta semana en el municipio de Calvià ha estallado un conflicto importante con el Ayuntamiento. Debido a un error informático aquellas personas que decidieron hacer el pago de sus impuestos de forma fraccionada eran consideradas por el sistema informático como impagados, y por ende, se puso en marcha el procedimiento de notificación y advertencia de recargo si no pagaban.

Imagínense la cara de una persona que paga sus impuestos de forma voluntaria pero a plazos, para poder hacerlo cómodamente, y a los pocos meses le llega una carta reclamando el pago de la totalidad de los impuestos bajo amenaza de embargo y con cobro de un recargo.

Esto ha sido debido al fallo de un sistema informático que costó la friolera de 200,000 euros.

En Pleno se debatió internalizar el servicio de recaudación, Ciudadanos, que estaba a favor de recuperar un servicio que suponía un ahorro de 1 millón de euros, avisó precisamente que internalizar el servicio en tan sólo 15 días era sumamente arriesgado dada la complejidad de recuperar el sistema. Los propios técnicos en sus informes admitían que la administración en esos momentos no disponía de los medios suficientes para gestionarlo.

Advertimos que hacía falta un periodo de 6 meses para recuperarlo y propusimos licitar el servicio por un periodo que permitiese preparar con tiempo y sin prisas la internalización, punto que el gobierno no escuchó dada las prisas por colgarse una medalla.

Consecuencia de esto: ahora los ciudadanos corren el riesgo de despertarse un día y ver que sus cuentas bancarias han sido embargadas, lo que les obliga a acudir al Ayuntamiento y avisar de este error informático. Es la grave consecuencia, y no será la última, de integrar un sistema tan delicado y complejo en tan sólo 15 días y en contra del criterio de los técnicos que recomendaban un plazo más amplio.

Al final, como siempre, los que pagan las consecuencias de una mala gestión son los ciudadanos y no el político que se equivoca tomando una decisión precipitada.

Un ejemplo de como no se debe gestionar la administración de Calvià