Sí se puede Calvià asegura que la ruptura con sus socios de gobierno se basa en el incumplimiento de los acuerdos de investidura y no en la negativa a los presupuestos para el 2018, como afirmó ayer el alcalde de Calvià Alfonso Rodríguez Badal. Según la formación morada, Fernando Alcaraz dejó de asistir a las reuniones de equipo de Gobierno "cansado de recriminar la nula organización y descoordinación" del Ejecutivo.
La formación de Alcaraz acusa al alcalde de actuar de "manera siempre precipitada y a destiempo, fruto de una nula planificación". Recuerdan que no se ha acometido el acondicionamiento de las diez viviendas propiedad municipal para rescate ciudadano, violencia de género, desahucios o acogida de refugiados, "un acuerdo prioritario de investidura".
Desde Sí se puede Calvià también afirman que "en ningún momento se ha podido debatir ni consensuar ningún presupuesto para 2018 de los servicios municipales porque ni tan siquiera los hemos recibido por parte del PSOE". Para la formación morada es una muestra más de “postureo socialista” y omitiendo las carencias reales de las mismas. Una decisión que "conlleva un derroche económico desmesurado y desproporcionado para la realidad de Calvià".
