jueves. 28.03.2024

Para nada.

Y lo dicen quienes ya se han estrenado en las dos que se celebran en Mallorca, en la de Palma Activa que gestiona el Ajuntament del ecosoberanista Antoni Noguera y la de Calvià, que gestiona el gobierno que dirige el socialista Alfonso Rodríguez.

Bien es cierto que en la de Calvià se molestan mucho más y cuando ven los currículums llaman, dan una cita, toman nota, escuchan y gastan un tiempo que se agradece, comentan estos expertos en búsqueda activa de empleo.

Y ponen ejemplos muy significativos. En la de Palma Activa que se celebró el pasado año no sólo pedían políglotas, sino que todos los anuncios de reclamo que había en los stands buscando camareros, recepcionistas, animadores, camareras de piso para hoteles austriacos, suizos, norte de Italia, generalmente, había un límite de edad: no sobrepasar los 30 años.

La entrega masiva de currículums está a la orden del día y con resultado Cero sin reservas, es decir, Cero total.

La cuestión es si todo el esfuerzo y el tiempo que tanto gestores como buscadores de empleo utilizan en este tipo de eventos sólo sirve como plataforma de propaganda de la institución de turno.

O puede que entre tanto buscador de empleo alguna de las empresas con las que los ayuntamientos interlocutan encuentren a uno, dos, tres o cuatro mirlos blancos, que también puede ser. 

Nota a pié de página: mirlo blanco como algo extraordinario.

¿Sirven para algo las ferias de empleo?