jueves. 28.03.2024

El comentario-reflexión lo emite un amigo feisbuquero de Francesc Antich, expresident del Govern y ahora senador por la comunidad autónoma. Y lo emite después de que Antich compartiera en su muro la entrevista que colgó el PSIB y que le hizo Susanna Griso a Pedro Sánchez, en la que le preguntó por la polémica del catalán en la sanidad de Baleares.

Los socialistas isleños acompañaban el vídeo de la entrevista con un comentario: "Algunos gritan mucho diciendo que el debate está entre el catalán o castellano, pero el debate real de la sanidad en Baleares es derecha o izquierda, recortes o retorno de derechos, despidos o convocatoria de oposiciones".

"Hacer política con la lengua es una mierda", respondían desde el otro lado en el muro del senador socialista. Para a continuación añadir: "Lo que de verdad importa es la comprensión entre las personas dejando de lado orientación política, raza u orígenes sociales. El español en la modalidad castellano es un lenguaje de difusión mundial, en todas sus variantes territoriales. En Baleares se hablan distintas variantes lingüísticas tan respetables como cualquier otra. Dejemos de obligar u orientar a la gente que, cuando y como tienen que expresarse. Así sólo estamos creando analfabetos desarraigados y limitados", fin de la cita.

Pero también hay socialistas que han reprochado a su propio partido la deriva que está teniendo lo del idioma en las Islas.

"Siempre he sido socialista, pero ahora estoy muy decepcionada por todo lo que están haciendo con los sanitarios. No lo comprendo, nunca ha habido problemas con el idioma. Llevo 18 años trabajando con personas y nunca he tenido problemas. Me obligan sacar un catalán que no sirve para nada. Quiero mucho mi profesión pero me iré a la calle, menos mal que mis hijos son grandes. Si no fuese así quiero que sepas que todo España sabría lo que está pasando aquí. Aun así, puedo decirte que te conocí y eres estupenda como persona", no se lo dicen a Antich, se lo dicen a otra socialista menorquina que se apartó de la primera línea política y que ahora comparte Isla con el movimiento de Mos Movem de Úrsula Mascaró.

Hablamos de Joana Barceló y cuentan a este digital que sigue siendo muy querida en la Isla, dónde ahora trabaja en su plaza de inspectora de Consumo.

"Hacer política con la lengua es una mierda"