viernes. 19.04.2024

El líder del Partido Democrático (PD), Matteo Renzi, ha anunciado este lunes su dimisión al frente de la formación. Una dimisión que llega horas después de la "derrota clara" sufrida en las elecciones generales de este domingo en Italia. Además, Renzi ha adelantado que su formación no sellará ninguna alianza y pasará a la oposición.

En una esperada comparecencia, Renzi ha reconocido que se trata de "una derrota clara" y ha defendido "abrir una nueva página en el partido", cuyo liderazgo ha anunciado que abandonará una vez constituido el Parlamento y formado el nuevo Gobierno.

Según ha precisado, ya ha pedido la convocatoria de una asamblea nacional del partido. Y, así, preparar un congreso en el que se elija al nuevo líder. Para ello ha defendido la necesidad de primarias. En cuanto a su futuro, ha dicho que se limitará a ser senador raso, celebrando su elección como tal por Florencia este domingo.

El antiguo primer ministro ha subrayado que quien ha ganado las elecciones no tiene los apoyos suficientes para gobernar. En este sentido, ha dejado claro que mantienen su promesa electoral. Dicha promesa pasa por el "no a un gobierno con los extremistas ni de los extremistas". "Cuando hemos dicho no a la cultura del odio no estábamos bromeando", ha insistido.

Así, ha recalcado que del Movimiento 5 Estrellas y de la Liga le separan sobre todo su "antieuropeísmo" y ha recordado las numerosas acusaciones que desde estas formaciones se han vertido contra el Partido Democrático, tachándoles de "corruptos" o "mafiosos" entre otros. "Haced gobierno sin nosotros", les ha espetado.

"Si somos así, nuestro puesto en esta legislatura está en la oposición", ha recalcado. Insistiendo en que el PD no dará su apoyo a un "gobierno antisistema". En un momento en el que se apela a la responsabilidad, ha añadido, "seremos responsables" y por ello "estaremos en la oposición".

En este sentido, ha prometido una oposición responsable que elogiará al nuevo Gobierno "si lo hacen mejor". Dejando, ha dicho, atrás la "cultura del odio y los insultos"

El PD, actualmente al frente del Gobierno, ha sufrido un fuerte varapalo en las elecciones generales de este domingo en Italia, quedando por debajo del 19 por ciento de los votos, si bien es la segunda fuerza política a nivel nacional.

Renzi, que fue primer ministro entre febrero de 2014 y diciembre de 2016, confiaba en regresar al Palazzo Chigi. Residencia que abandonó tras ligar su futuro político al resultado del referéndum sobre la reforma constitucional que perdió. El resultado es un duro revés para el PD. Pues, en las elecciones europeas de 2014, con Renzi ya al frente, logró el 40 por ciento de los votos; ganando, además, las elecciones generales de 2013 con el 30,32 por ciento.

En este sentido, el antiguo alcalde de Florencia ha defendido que el resultado habría sido otro más centrado en la permanencia en la UE si Italia hubiera ido a las urnas el año pasado, en el lapso entre las elecciones en Francia y las de Alemania.

En 2014 "conseguimos frenar el viento extremista". Sin embargo, "esta vez no hemos conseguido bloquearlo", ha lamentado. En su opinión, el "símbolo" de la campaña lo constituye que el ministro del Interior, Marco Minitti, no haya obtenido el escaño al que optaba. Pese, ha lamentado, al "trabajo extraordinario" que ha realizado en materia de inmigración. Algo que ha reconocido es "el principal problema dejado en herencia por mi Gobierno". Además, Minitti ha sido derrotado por el candidato del M5S. Un candidato al que su propio partido considera "impresentable"

Renzi renuncia y adelanta que el Partido Democrático estará en la oposición