jueves. 28.03.2024

El Frente Nacional francés celebra este fin de semana un congreso con el que aspira a sellar una "refundación" e iniciar la "reconquista". El objetivo de la formación ultraderechista es presentarse como un alternativa viable de Gobierno tras una serie de elecciones en las que se le ha resistido el asalto definitivo a las esferas de poder.

El Frente Nacional para la Unidad Francesa surgió en 1972 como heredero político de un movimiento nacionalista y de extrema derecha, de la mano de Jean-Marie Le Pen. Su irrupción definitiva, sin embargo, no llegó hasta la década de los ochenta, ya con el fantasma del comunismo sobrevolando la escena internacional.

A lo largo de su historia, ha ido amoldándose a las circunstancias, pero el mensaje nacionalista ha seguido patente y le concedió su primer gran éxito electoral en el año 2002, cuando Le Pen logró colarse contra pronóstico en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. El estupor generalizado impulsó a Jacques Chirac hasta el 82 por ciento en la ronda definitiva, pero Francia asumió que el Frente Nacional no era una anécdota política.

Para superar el legado de Jean-Marie Le Pen, el Frente Nacional se reinventa