martes. 19.03.2024

Ana Julia Quezada ha confesado el crimen de Gabriel Cruz ante la Guardia Civil y sus abogados. La ex pareja del padre del niño ha asegurado que discutió con la víctima y le golpeó en la cabeza el día de su desaparición, según recoge el diario El País.

Por su parte Cuatro noticias informa que lo hizo sola tal y como habían apuntado los investigadores. Las fotografías de la acusada cargando el cuerpo del menor han sido decisivas para que se derrumbara en el interrogatorio.

Ha confesado que tuvo una discusión con Gabriel y que le golpeó con la parte roma de un hacha, y que después supuestamente lo asfixió.

EL ESCENARIO DEL CRIMEN

Tras la confesión, en la tarde de este martes ha sido conducida de nuevo al registro de la finca familiar para ver dónde escondió las ropas del pequeño.

Otras fuentes apuntan a que una vez muerto, desnudó el cuerpo del niño y lo enterró cerca de la alberca. Finalmente se ha sabido que la ropa la tiró a unos contenedores lejanos donde este martes la habrían encontrado los agentes.reconstrucción del asesinato de Gabriel

Las ropas son una pieza esencial en la investigación, porque una vez analizadas, se sabrá si en la muerte del pequeño hubo o no más violencia todavía.

La autopsia reveló que presentaba golpes en el cuello y apareció desnudo cubierto de lodo y barro, envuelto en una manta.

Según el rotativo de Prisa, la finca, donde supuestamente se estaba adecentando una casa la pareja formada por Ángel y la detenida, se ha convertido en el principal escenario del crimen.

Está siendo rastreada palmo a palmo. Ahora también excavada. Según fuentes próximas a la investigación, los familiares la inspeccionaron ampliamente y "en varias ocasiones", "pozo a pozo" sin encontrar nada. Lo que les lleva a pensar que pudo cambiar varias veces de sitio el cuerpo del pequeño.

HIPÓTESIS DE CÓMO PLANIFICÓ LA MUERTE DEL NIÑO Y EL POR QUÉ

Ana Julia Quezada llevaba en torno a año y medio con el padre de Gabriel y se conoce por fuentes próximas a la familia que la relación con el niño no era buena.

La investigación baraja dos hipótesis de móvil: el económico, habría insistido al padre de Gabriel con que ofreciera dinero por su rescate, y el de los celos, que serían provocados por el cariño que padre e hijo se tenían mutuamente y por la buena relación entre los padres de Gabriel, separados.

Expertos en estos casos aseguran que Quezada supuestamente habría planificado el asesinato del niño un día antes, aunque lo que ocurrió los días posteriores se tiene que enmarcar en una improvisación absoluta con una falta total de empatía.

RADIOGRAFÍA DE UNA MENTE ENTRENADA PARA LLEVAR A CABO SU PLAN

El día antes del asesinato Quezada estaba enseñando la finca con unos familiares, según los investigadores, para supuestamente preparar el asesinato.

La casa había estado alquilada y le había pedido a su novio vivir en la finca porque literalmente "no aguantaba a su suegra", a la abuela paterna de Gabriel.

La Guardia Civil y cómo ha llevado la investigación ha sido crucial en el desenlace de este caso.

Ana Julia Quezada confiesa que mató al niño Gabriel Cruz