viernes. 19.04.2024

El fundador y director de la ONG Pro Activa Open Arms, Òscar Camps, ha asegurado hoy que los tres miembros de la tripulación del barco de rescate de inmigrantes encausados en Italia "se enfrentan a penas de entre 4 y 7 años de prisión", por lo que ha subrayado que ahora la prioridad es "luchar para que no sean detenidos".

La Fiscalía de Catania ordenó este domingo la inmovilización del barco español "Open Arms" y la apertura de una investigación por un posible delito de "promoción de la migración ilegal" a Italia.

Los argumentos de las acusaciones contra los tripulantes del barco atracado en Italia son una excusa con el objetivo de "bloquear la intervención de las organizaciones humanitarias" en el mar Mediterráneo, ha dicho Camps.

En rueda de prensa, ha explicado que por primera vez la organización ha tenido que pedir ayuda al gobierno español para poder atracar en un puerto.

En concreto, el fundador de la ONG ha explicado que la organización contactó con el cónsul español en Sicilia y fue el Gobierno español el que negoció con el ejecutivo italiano que la embarcación pudiera atracar en el puerto de Pozzallo.

Camps ha explicado que "el motivo es lo de menos" y que se les podría haber acusado "de desobediencia y de cualquier otra cosa", con el único objetivo de eliminar la actuación de las organizaciones en el Mediterráneo.

"El motivo es lo de menos y le costará mucho a la fiscalía italiana demostrar todo lo que dice; entendemos que esto va mucho más allá de la decisión de un fiscal y, al final quien va detrás es la Unión Europea", ha asegurado Camps.

Según la ONG, "los tres miembros de la tripulación encausados se enfrentan a penas de entre 4 y 7 años de prisión, entre otros motivos, por facilitar el tráfico de personas" y la prioridad es "luchar para que no sean detenidos", ha dicho Camps, que ha señalado que, "de momento", los tripulantes se quedarán en Italia.

"Hemos pasado de ser víctimas de un ataque a ser acusados por el fiscal de Catania y estamos a la espera de que el juez dé credibilidad a las acusaciones", ha recalcado Camps, que ha asegurado que llevarán el caso "tan lejos como sea necesario".

El director de Open Arms se ha mostrado convencido de que la medida cautelar que mantiene el barco de la ONG inmovilizado "seguramente será definitiva, ya que otra organización pasó por esta misma situación el verano pasado y su barco sigue aún inmovilizado en un puerto italiano".

El fundador de la ONG ha detallado que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, contactó con el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, y que la organización se puso en contacto con el cónsul español en Sicilia y fue el Gobierno español quien negoció con el ejecutivo italiano que la embarcación pudiera atracar en el puerto de Pozzallo.

Precisamente, Colau ha anunciado que Barcelona "hará todo lo que sea útil para ayudar" y ofrecerá "apoyo jurídico": "Si hay una causa abierta haremos saber que Open Arms no está solo", ha dicho.

"Si es un barco con bandera española, el Gobierno debe hacer todo lo posible para que las personas sean liberadas", ha asegurado la alcaldesa, que ha afirmado que "es lo más grave que está pasando en Europa ahora mismo".

Pro Activa Open Arms ha denunciado la "campaña de desprestigio que sufren desde 2016 las organizaciones que trabajan en el Mediterráneo" y Camps ha resaltado que desde entonces "las dificultades han ido en aumento y el tono ha ido a más" y que ahora ya "han pasado directamente al ataque militar"

Sin embargo, el fundador de la ONG ha asegurado que no dejarán de estar en el Mediterráneo a pesar de la situación que vive hoy la organización, a cuya tripulación ha defendido porque "hicieron lo que debían hacer".

Camps no ha descartado enviar nuevos barcos si la inmovilización de la nave se mantiene, ya que ha defendido que su misión "es rescatar a las personas que están en peligro en el mar".

La alcaldesa de Barcelona ha reclamado a los estados europeos "que cumplan sus obligaciones jurídicas y acojan a la gente que huye de la guerra".

"No nos engañemos: cuando la gente huye, va a seguir viniendo por muchas barreras o mares que se pongan en medio", ha sentenciado Colau

La tripulación de Open Arms se enfrenta a penas de entre 4 y 7 años de cárcel en Italia