Por María Jesús Almendáriz
La Vía Conectora, "Es un proyecto demasiado faraónico" sostienen los vecinos del Coll d'en Rabassa que no están dispuestos a que semejante mole de cemento les invada el barrio, si el Consell de Mallorca lo lleva a cabo tal y cono está ahora.
"Si lo llevan a cabo tal como está nos van a encerrar en una especie de gueto rodeados de cemento por todos lados", sentencia Joan Forteza, presidente de la Asociación de Vecinos del Coll d'en Rabassa y presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma.
Y desde luego no piensan quedarse de brazos cruzados porque el Coll ya es un barrio con demasiado ir y venir, demasiado trasiego de vehículos pesados por los depósitos de combustible de CLH, Mercapalma, las cocheras de la EMT y Fan, para que lo quieran incluso potenciar con este proyecto de dimensiones no aceptables, se queja Forteza.
ALEGACIONES A UN AÑO DE ELECCIONES
La idea, por tanto, es presentar alegaciones, aunque puede que su lucha para que no se lleve a cabo pase por otros derroteros, una vez vean por dónde va cada partido político, ahora que están a un año de elecciones.
Ninguno se compromete a rebajar el impacto de tan tremendo mamotreto que políticamente ha provocado tensión entre los integrantes del Pacte de Govern, al abstenerse Podem en la aprobación inicial.
Movimientos que desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma siguen con detalle, con la esperanza de que alguno de ellos se desmarque con rotundidad y abran una nueva vía de consenso en el que esperan estén invitados, porque hasta ahora nadie se ha puesto en contacto con ellos.
QUIEREN REBAJAR EL PROYECTO Y QUE LES PIDAN SU OPINIÓN
Circunstancia que Joan Forteza se la hizo saber a la presidenta del Govern, Francina Armengol, cuando se paseó por los puestos que las diferentes asociaciones montaron, como ya es habitual, a las faldas del castillo de Bellver el Diumenge del Angel. Extremo éste que le negó Armengol, como ya informamos en mallorcaconfidencial.com.
La consellera insular de Territori, la socialista Mercedes Garrido, no se encontraba entre la comitiva que subió a Bellver a tomar el pulso de lo que piden, denuncian o celebran los vecinos de la capital balear.
El polémico tramo de la Vía Conectora, tras su aprobación inicial, ha entrado en el preceptivo periodo de alegaciones.
