jueves. 28.03.2024

El presidente de Asaja-Balears, Biel Company, ha criticado este miércoles la "pasividad" e "irresponsabilidad" de las Instituciones al problema del tratamiento y eliminación de los residuos cárnicos procedentes de los animales sacrificados en los mataderos de Mallorca, por lo que ha reclamado una solución "definitiva" a un problema que "colea desde hace demasiado tiempo".

Company ha manifestado que no desean que "se pongan parches" a esta problemática, como se viene haciendo, sino que "se acometan actuaciones definitivas que arreglen esta situación". "Lo que están haciendo los responsables del Govern y del Consell de Mallorca es un ejercicio de irresponsabilidad muy grande, ya que esta situación no puede prolongarse por más tiempo", ha añadido.

Asimismo, Company ha asegurado que los animales no pueden seguir parados "ni un día más" en las granjas, a lo que ha añadido que no descarta tomar "medidas de fuerza en los próximos días".

Por otra parte, el presidente de Asaja-Balears ha destacado la "paciencia" de los vecinos de la planta de Llucmajor, y considera que es "muy difícil aguantar la situación que ellos vienen padeciendo desde hay muchos meses".

El Consell de Mallorca confía en impulsar antes de que finalice la actual legislatura una nueva infraestructura para el tratamiento de residuos cárnicos, de entre tres alternativas que la Institución insular está estudiando, como son un digestor, una planta de biogás y un horno de incineración. Para cualquiera de los tres proyectos, la Administración supramunicipal maneja una inversión inicial de aproximadamente un millón de euros.

Así lo ha puesto de manifiesto en rueda de prensa el director insular de Residuos, Josep Maria Ferrà, después de que en los últimos días se hayan intensificado las protestas de los vecinos que residen cerca de la planta de tratamientos de Llucmajor, aquejados por los malos olores procedentes de la infraestructura, toda vez que el Ayuntamiento de esta localidad permanece a la espera de que se suprima la actividad de esta planta.

La consellera de Medio Ambiente, Marilena Tugores, está visitando estas semanas infraestructuras de diversos puntos de la península -como un digestor en Cáceres y un horno de incineración en Andorra- antes de optar por una de las tres alternativas. Además, deben tenerse en cuenta los informes económicos, medio ambientales y técnicos así como consensuarse con la empresa concesionaria del tratamiento -Tirme- ya que previsiblemente la infraestructura se instalará en las dependencias de la adjudicataria.

Al mismo tiempo, el director insular ha explicado que debido a la imposibilidad de depositar los residuos en la planta de Llucmajor después de que el Consistorio haya limitado el camino de acceso -tras lo cual el matadero de Palma ha optado por cerrar temporalmente sus puertas-, como solución provisional los residuos se trasladarán a Son Reus para posteriormente ser enviados a la Península en contenedores de refrigeración.

EL PP EXIGE UNA SOLUCIÓN "INMEDIATA"

Por su parte, el grupo popular en el Consell de Mallorca presentará una moción en el próximo pleno de la institución para exigir una solución "inmediata" a los problemas derivados de la eliminación de los residuos cárnicos de la isla, que este martes obligaron al matadero de Palma a interrumpir su actividad al no disponer de ningún espacio para depositar los despojos de los animales sacrificados.

Así lo ha anunciado el portavoz del PP en el Consell, Jaume Font, quien ha recordado que éste es un conflicto que "se arrastra desde hace muchos meses" y que fue el presidente del Govern, Francesc Antich, quien "se comprometió a resolverlo", si bien en problema "se ha agravado" hasta el punto de provocar el cierre de las instalaciones.

Asaja critica la "pasividad" institucional ante el problema de los residuos cárnicos