jueves. 28.03.2024

El nuevo "rey de las motos", el mallorquín Jorge Lorenzo, recién proclamado campeón del mundo de MotoGP, ha disfrutado esta noche del homenaje y la alegría de varios miles de moteros y aficionados de su ciudad natal, Palma, donde también ha recibido el reconocimiento de sus principales autoridades.

Fiel a su carácter expansivo y natural, el piloto mallorquín ha derrochado simpatía entre quienes se han acercado a saludarle y felicitarle por ser desde hace un par de semanas el "número uno". Jorge Lorenzo ha llegado esta tarde a la capital balear tras haber completado la fase del mundial de MotoGP en Oriente.

"El recibimiento de los aficionados y de la gente de la calle ha sido bestial, no me esperaba esta calidez", ha asegurado el deportista mallorquín, que ha reconocido que se le ha escapado alguna lágrima, algo "muy difícil" en él.

Aunque ya ha conseguido lo que quería, el piloto ha recordado que es muy joven, en concreto 23 años, y que le gustaría conquistar nuevos títulos, para él y para su afición.

La gran fiesta ha comenzado pasadas las 18:00 horas en el aeropuerto de Palma donde Air Europa, compañía patrocinadora del piloto, ha bautizado un boeing 737-800 con el nombre de "Lorenzo's Land".

A partir de hoy, el cielo es también la tierra de Lorenzo porque está llamado a "llegar muy lejos y muy alto", ha dicho el presidente de Air Europa, Juan José Hidalgo, que ha compartido champán y sonrisas con el joven piloto frente a un centenar de periodistas que aguardaban su llegada a la isla.

Seguidamente, Lorenzo se ha dirigido a la terminal A donde cientos de motoristas, con sus motos rugiendo, han acogido con entusiasmo al campeón para escoltarle hasta la sede del Gobierno balear.

La hinchada de este piloto que se subió por primera vez a una máquina de dos ruedas a los 3 años no ha dejado durante toda la tarde de jalear a su ídolo y de ondear banderas.

Chicho Lorenzo, su padre, ha llegado a decir que hoy es uno de los días más felices de su vida. "Ser dos veces campeón del mundo de 250 cc (2006 y 2007) es mucho, pero ser campeón de MotoGP es todo", ha declarado emocionado.

"Es el máximo objetivo que teníamos desde hace 20 años y lo hemos conseguido; a partir de ahora, a conquistar otras metas y otros sueños", ha declarado el padre de Lorenzo, que cuando su muchacho apenas andaba ya le construyó un microcircuito para que comenzara a entrenarse en una moto que él mismo le hizo.

En el aeropuerto, Lorenzo se ha subido a un coche descapotable junto a su madre, María, a la que se siente muy unido. Seguidamente han sido escoltados por los moteros que han recorrido junto a ellos las principales calles de Palma entre el ruido ensordecedor de sus máquinas.

Con el "look" que le hace ser justamente Jorge Lorenzo -máxima seguridad en si mismo, simpatía a borbotones y chupa negra de motero-, el "número 1" ha sido recibido en la sede del Gobierno autonómico por el presidente de Baleares, Francesc Antich; la presidenta del Parlament balear, Aina Rado; y el delegado del Gobierno, Ramón Socías.

Ya en el balcón, con el himno de los campeones como fondo, el "We are the champions" de Queen, Lorenzo ha querido agradecer a todos los presentes el apoyo que le han dado a lo largo de los años.

"Estoy orgulloso de representar a Mallorca, de traer este título y de disfrutarlo con todos vosotros", ha asegurado "alucinado" el piloto a su afición escoltado por unos padres emocionados y satisfechos, a quienes el piloto les ha definido como las "personas más importantes" de su vida.

De su primer entrenador, su padre, ha subrayado que es una persona "luchadora" que le ha enseñado "todo" sobre las motos.

No menos contento se ha mostrado el presidente de Baleares, quien ha dicho estar orgulloso por la "magnífica" trayectoria deportiva de Lorenzo y de los deportistas de Mallorca mundialmente conocidos, caso del tenista Rafa Nadal, otro "número uno". EFE

Palma se convierte en Lorenzo's Land