jueves. 28.03.2024

Movistar y Vodafone encabezan casi empatadas las votaciones de los consumidores a La Peor Empresa del Año, en las que están participando miles de consumidores a través de la web FACUA.org/lapeorempresa.

FACUA-Consumidores en Acción organiza por segundo año estos premios, en cuya primera fase los usuarios propusieron más de cien empresas por haber desarrollado las actuaciones más irresponsables, abusivas o fraudulentas para enriquecerse a costa de vulnerar los derechos de los consumidores.

Las cinco empresas que han sido seleccionadas para las nominaciones son Bankinter, Power Balance, Ryanair y las dos principales compañías de telecomunicaciones del país, Movistar y Vodafone. La premiada se dará a conocer el 15 de marzo, Día Mundial de los Derechos de los Consumidores.

Ambas también estuvieron nominadas en la edición anterior, al igual que Ryanair. El año pasado ganó Movistar, con el 35% de los votos y una ventaja de doce puntos sobre la que quedó en segunda posicición, la desaparecida aerolínea Air Comet, del ya ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán.

Sólo dos puntos de distancia

En esta ocasión, cuando el plazo de las votaciones acaba de atravesar su ecuador, Movistar y Vodafone están a la cabeza de los votos con una distancia de sólo dos puntos.

Movistar corre el riesgo de acabar ganando en dos ediciones consecutivas este premio. El gran cambio introducido el año pasado por la principal empresa de telecomunicaciones del país, se produjo simplemente en su imagen corporativa, pero no en el trato a los usuarios, que no resulta precisamente el mejor ejemplo a imitar por el resto del sector.

La compañía española continuó con una política de publicidad engañosa, tarifas excesivas y desatención a las reclamaciones de sus clientes.

Por su parte, la multinacional británica Vodafone, la segunda compañía de telecomunicaciones en cuota de mercado en España, fue en 2010 la empresa más denunciada por los consumidores en FACUA.

Vodafone destacó por sus ofertas fraudulentas, dar de alta a numerosos clientes en servicios no solicitados, aplicar precios desproporcionados y despreciar con la ignorancia o la negativa por respuesta a las reclamaciones por el cobro de cantidades facturadas irregularmente.

En cuanto a la nominación de Bankinter, el banco cuyos principales accionistas son Jaime Botín y el grupo francés Crédit Agricole está siendo objeto de una impresionante escalada de denuncias. Principalmente por las trampas que esconden sus clips, unos oscuros productos que colaron a multitud de usuarios prometiéndoles que protegerían sus hipotecas de las subidas de tipos de interés sin aclararles que pagarían grandes cantidades si bajaban.

Por su parte, la compañía irlandesa Ryanair es líder en reclamaciones en el sector aéreo por su sistemático incumplimiento de la legislación y una larga lista de abusos y fraudes con los pasajeros. De ellos se burla no dando respuesta a sus reclamaciones o haciéndolo en inglés, generalmente para negarles el pago de las compensaciones por cancelaciones y grandes retrasos o la devolución de recargos cobrados ilegalmente.

La quinta nominada es Power Balance. El timo de las pulseras holográficas con poderes mágicos que prometen aumentar el equilibrio, la fuerza, la flexibilidad o la resistencia nació en EEUU y se extendió a multitud de países, entre ellos España, donde Power Balance ha presumido de vender cientos de milles de unidades. Un fraude que le ha reportado ingresos millonarios ante la pasividad del Gobierno y las comunidades autónomas.

El Peor Anuncio del Año

Los premios cuentan con otras dos categorías, El Peor Anuncio y La Peor Práctica Empresarial del Año.

Los cinco nominados a El Peor Anuncio del Año son los de Fontvella Ecoligera, la campaña del ADSL de Vodafone Tu casa es más casa, los pagarés de Nueva Rumasa, los productos seudomilagrosos de Club Natura y la publicidad de Actimel, que repite después de haber quedado en segunda posición el año pasado.

En la edición anterior, El Peor Anuncio del Año fue la campaña Si eres legal, eres legal, del Ministerio de Cultura, que acaparó el 45% de los votos.

La Peor Práctica Empresarial del Año

En la categoría de La Peor Práctica Empresarial del Año han sido nominadas las altas fraudulentas en la recepción de SMS de pago, la negativa de las eléctricas a lanzar ofertas competitivas para forzar así al Gobierno a que siga subiendo sus tarifas, las penalizaciones abusivas por las bajas en contratos de móvil, el incumplimiento del plan de sustitución de contadores de la luz, las altas en registros de morosos por deudas falsas o hinchadas.

El año pasado, la ganadora fue el spam telefónico, con el 26% de los votos.

Movistar y Vodafone encabezan casi empatadas las votaciones a La Peor Empresa del Año