viernes. 19.04.2024

La Asociación de Empresas Comercializadoras de Equipos Informáticos de Balears, federada en PIMEM, ha visto caer su actividad en un 50% como consecuencia de la reducción del gasto en todos los sectores para hacer frente a la crisis económica. “A pesar de que somos un sector necesario para que otras empresas puedan funcionar, nuestro volumen de trabajo ha caído un 50%”, afirma Francisco Serra, presidente de la entidad.

El recorte en el volumen de trabajo y de ingresos de las empresas comercializadoras de equipos informáticos ha repercutido también en la reducción de personal y ha provocado incluso el cierre de algunas de estas mercantiles.

“Hemos tenido que ajustar nuestras plantillas ante la caída de los ingresos, porque la situación no es soportable para las empresas, no se trata de reducir por reducir, sino que la realidad nos obliga”, explica Serra, al tiempo que refiere que en muchos casos se trata de trabajadores “muy cualificados” que han perdido sus puestos de trabajo.

El líder de la patronal explica que una de las principales causas de la situación que padece el sector que representa es la falta de renovación de equipos informáticos y la falta de mantenimiento de éstos. “Antes las empresas y particulares renovaban sus equipos informáticos cada cuatro años aproximadamente y ahora posponen estos cambios durante más tiempo”.

En este sentido, Serra recuerda la importancia de renovar o contratar el mantenimiento de los equipos informáticos y agrega que: “las herramientas informáticas requieren actualizaciones y la falta de mantenimiento puede repercutir seriamente en la productividad y fiabilidad de los sistemas. Por otra parte, para nadie es una novedad que los procesos optimizados y la utilización de sistemas adecuados repercuten positivamente en la productividad de las empresas”.

El presidente de la Asociación de de Empresas Comercializadoras de Equipos Informáticos de Balears concluye diciendo que las empresas deberían optar por operaciones de leasing y renting en la adquisición y uso de sus equipos informáticos, para que se puedan garantizar una renovación adecuada sin que repercuta esto en un gasto excesivo.

La venta de productos informáticos cae un 50% en Baleares