jueves. 28.03.2024

El 98,6% de las PYME españolas utiliza el ordenador y el 97,2% se sirve de Internet para realizar sus procesos de negocio. Así se desprende del 'Informe ePyme 2011. Análisis sectorial de implantación de las TIC en la PYME española', elaborado por Fundetec y la Dirección General de Industria y de la PYME (DGIPYME), que se ha presentado en Madrid, en el marco del III Salón Miempresa.

Este informe, en su cuarta edición, se basa en la información recopilada a partir de más de 2.000 encuestas realizadas a PYME de toda España dedicadas a nueve sectores económicos que representan el 40% del PIB (logístico, transporte, hotelero, turismo rural, comercio minorista, agroalimentario, artesanía, instaladores de telecomunicaciones y, por primera vez, ingeniería de consulta), tomando una muestra proporcional al universo de empresas existentes.

Según recoge el informe, en 2011 el ordenador (portátil o de sobremesa) alcanza una penetración del 100% en cinco de los sectores analizados (agroalimentario, hotelero, comercio minorista, instaladores TIC e ingeniería de consulta), mientras que en el resto supera el 95%.

Los porcentajes descienden en el caso de las microempresas de menos de 10 empleados, situándose en el 66,2% en cuanto a disponibilidad de ordenador y en el 58,1% en uso de Internet. Existe una clara diferencia entre las microempresas de 0 a 2 empleados, donde la penetración del PC es del 62%, y las de 3 a 9 trabajadores, con un porcentaje muy similar al de las PYME (91,8%). No obstante, es reseñable que incluso los sectores analizados con mayor proporción de microempresas (transporte, artesanía, turismo, instaladores TIC y comercio minorista) se sitúan muy por encima de la media nacional de microempresas.

Los datos obtenidos en 2011 revelan porcentajes muy similares de disponibilidad de equipamiento tecnológico básico respecto al año anterior, pero tiene especial relevancia el avance registrado en el sector comercio minorista: mientras hace dos años el ordenador estaba presente en casi 7 de cada 10 empresas, ahora se utiliza en la totalidad de los establecimientos, y la conexión a Internet ha pasado del 55,8% en 2009 al 86,6% en 2011. Ello evidencia que los comerciantes han realizado un notable esfuerzo para modernizar su negocio, incorporando más productos y servicios TIC para hacerlo más competitivo. Algo similar ha ocurrido en el sector transporte (en dos años ha pasado del 77,3% al 98,2% en uso del ordenador y del 73,7% al 87,7% en uso de Internet), apreciándose una equiparación entre todos los sectores analizados en cuanto a equipamiento tecnológico básico.

Marketing y comercialización

El 64% de las PYME y el 25% de las microempresas disponen de página web corporativa, registrando un crecimiento interanual del 3% y el 5%, respectivamente, y en cuatro de los sectores analizados (hotelero, logístico, agroalimentario e ingeniería) su penetración supera el 90%, mostrando la progresiva confianza de las empresas en esta herramienta como parte de su estrategia de marketing y comercialización.

Otra herramienta que poco a poco va calando entre las empresas españolas son las redes sociales, destacando su uso en el caso de las empresas hoteleras y de turismo rural (por encima del 50%), aunque aún minoritario en el resto, especialmente en el transporte (8,6%).

En lo que respecta al comercio electrónico, continúa sin despegar en nuestro país, ya que en el segmento empresarial que más se utiliza (empresas de 50 a 249 empleados) tan sólo alcanza a tres de cada diez empresas en el caso de las compras y a una de cada cinco en cuanto a ventas. A medida que se reduce el número de empleados desciende también el uso del comercio electrónico, siendo de nuevo el sector hotelero y el turismo rural los que más lo utilizan (el 91% y el 82,7% de las empresas que disponen de conexión a Internet, respectivamente), y el agroalimentario y el comercio minorista, los que menos (el 21% y el 53% de las empresas con conexión, respectivamente).

Usos y aplicaciones

El uso de los trámites telemáticos para relacionarse con la Administración Pública avanza en 2011, aunque nuevamente hay una gran diferencia entre las empresas de más de 50 empleados (nueve de cada diez son usuarias de la eAdministración) y las de menos de 3, dado que éstas tienden a externalizar en gestorías sus procedimientos administrativos. La media nacional de uso de la Administración electrónica es del 70,1% para las PYME y del 39,8% para las microempresas. Por sectores, los más activos son el logístico, el agroalimentario, la ingeniería de consulta y los instaladores TIC, todos ellos por encima del 70%; en el lado opuesto se sitúan el comercio minorista, la artesanía y el turismo rural, todos por debajo del 36%.

En cuanto a las aplicaciones informáticas más utilizadas por las PYME, en primer lugar siguen estando las ofimáticas, seguidas de las de facturación y contabilidad. En los tres casos, los sectores tecnológicamente más maduros (hotelero, logístico e instaladores TIC) presentan un porcentaje de uso muy elevado (por encima del 92% en ofimática, del 79% en facturación y del 68% en contabilidad), mientras que en los que se sitúan en un nivel más inicial, como el comercio minorista, su uso avanza de forma notable, con crecimientos en dos años de 30 puntos en ofimática (87%), de 26 puntos en facturación (65,5%) y de 17 puntos en contabilidad (56,5%).

Si hablamos de aplicaciones específicas para cada uno de los sectores, cuatro de ellos se sitúan por encima del 80% en el uso de alguna aplicación especialmente diseñada para sus procesos de negocio, llegando el sector logístico al 91,8% en el caso de la gestión de pedidos. Las herramientas de cálculos técnicos son utilizadas por el 89,4% de las empresas de ingeniería, y las de gestión de reservas están presentes en el 87,9% de las de turismo rural y en el 83,5% de las empresas hoteleras.

Niveles tecnológicos por sectores

El informe diferencia tres niveles tecnológicos, en función de que las empresas dispongan únicamente de infraestructura básica; que utilicen también herramientas de gestión, presencia en Internet y comercio electrónico; y que cuenten además con herramientas específicas para su cadena de valor, herramientas en movilidad, eAdministración y redes sociales.

En base a estos tres niveles, en 2011 se aprecian resultados similares al año anterior en casi todos los sectores analizados, con la única diferencia en la posición de cabeza, en la que el sector logístico desbanca al hotelero como el de mayor uso de las TIC en todos los niveles. En última posición, sin embargo, aunque se mantienen los mismos sectores, el comercio minorista y el transporte, estos han experimentado un importante avance. Por tanto, aunque continúan teniendo gran recorrido de mejora, dado que entre ambos suman casi el 30% del PIB nacional esta tendencia se interpreta como una buena noticia que contribuirá al aumento de su competitividad, necesaria para la recuperación económica del país.

Conclusiones y recomendaciones

La desaparición de muchas empresas, las dificultades de financiación y la necesaria reducción del gasto, provocadas por un difícil año de crisis, han supuesto un freno al avance de las TIC en 2011, según concluye el informe. Asimismo, se ha percibido cierta caída del entusiasmo inicial, al no cumplir en algunos casos las aplicaciones adoptadas las expectativas de los empresarios. No obstante, se espera en una siguiente fase el ajuste entre expectativas y prestaciones, simplificando las herramientas y adaptándolas a las necesidades reales de cada sector para que las TIC se integren definitivamente en el negocio.

Por otro lado, destaca las ventajas que pueden aportar a la PYME los servicios basados en cloud computing o pago por uso, que permiten utilizar las soluciones sin grandes inversiones ni grandes conocimientos tecnológicos, y las tecnologías de movilidad (a las que en esta edición se ha dedicado un cuadernillo independiente), por su aportación a los procesos internos a precios razonables. En este sentido, se recomienda aumentar la capacitación de las empresas en el uso de los nuevos terminales móviles inteligentes.

El informe recomienda también que la Administración Pública mantenga su papel tractor a la hora de exigir a determinados sectores el carácter telemático de sus interacciones, así como contribuir, a través de ayudas y subvenciones, a la financiación de las inversiones TIC y a la capacitación tecnológica de las PYME, prestando una atención especial a las microempresas de 0 a 2 empleados.

La crisis frenó al avance de las TIC de las PYME en 2011