viernes. 19.04.2024

La presentación del nuevo iPad fue lo que estaba previsto, nada más y nada menos, una puesta en escena bien orquestada para desvelar una tableta que superó a sus predecesoras pero careció de elemento sorpresa. Apple actualizó el dispositivo con una resolución de pantalla de alta definición similar a la que figura en los iPhone 4 y 4S, mejoró el procesador e hizo el aparato compatible con redes 4G (que en España no estarán operativas hasta 2013).

Sin embargo, se olvidó de ofrecer algo original capaz de dejar a los analistas con la boca abierta, un factor que Steve Jobs había convertido en un hábito.

El diario "The New York Times" habló de "cambios modestos", la misma falta de entusiasmo que se recogían en blogs especializados como CNet o ZDNet, donde incluso se preguntaban si el debut de la tableta había sido decepcionante.

El nuevo iPad decepciona