La Cimera Social de Baleares ha apoyado esta mañana la huelga general que han decidido convocar CCOO, UGT, STEI, USO y otros sindicatos, mediante una “peformance” en que se han ido descubriendo varios mensajes que hacían referencia a los motivos “para parar el país” el 14 de noviembre.
Cuando algunos de los representantes de las cerca de 40 organizaciones sindicales y sociales han desplegado los carteles se ha podido leer: 14N huelga general y ciudadana; tenemos muchos motivos; 129.000 hogares de las Islas Baleares tienen a todos sus miembros en el paro; el 18,5% de la población balear está en riesgo de pobreza; el fracaso escolar en el archipiélago afecta al 39% del alumnado; 46.559 desahucios en España en los tres primeros meses de 2012; la pensión media en Baleares es de 762 €; protestas razonables ante medidas irracionales; ciudadanos y ciudadanas, el 14N expresad vuestra indignación!; sé previsor, no consumas, no realices trámites administrativos; acude a la manifestación a las 18.00 h en la plaza de España.
Uno de los portavoces de la Cimera y representante de Pro-Social, Miquel Cruz, ha animado a los trabajadores a participar en la huelga y a los parados, a los pensionistas, a los estudiantes, autónomos, inmigrantes y a la ciudadanía en general a no consumir este día, y a ir a la manifestación que saldrá a las 18.00 de la plaza de España de Palma.
“Es la primera vez que las entidades y organizaciones civiles que conforman la Cimera Social de Baleares apoyan la convocatoria de una parada general por considerar que la situación merece no tan sólo una huelga laboral, sino social y política”, ha subrayado Cruz.
Cruz ha insistido en que el 14-N no es tan sólo una reivindicación de los trabajadores sino que tiene que ser un llamamiento a la solidaridad con los más débiles y al ejercicio de la democracia. “Vivimos una democracia mutilada por el recorte de derechos y la presión policial”, ha dicho.
El representante de la Cimera Social ha apelado a dar una respuesta ciudadana que pare la vida cotidiana por muestre el rechazo al “modelo de país que tan sólo quiere empobrecer todavía más la población”.
Ha añadido que hay “alternativas” a los recortes de Bauzá, Rajoy y la “troica” para salir de la actual situación de crisis y ha propuesto, entre otros medidas, “establecer una fiscalidad progresiva, el impuesto de patrimonio y sucesiones; aumentar las tasas de fortunas y sueldos más potentes y beneficios financieros; e incrementar el presupuesto de los técnicos de Hacienda para que puedan combatir el fraude fiscal”.
Además, ha reivindicado una banca pública y la implantación de un alquiler social para las viviendas que no se están utilizando.
