jueves. 28.03.2024

Finaliza el año y es un buen momento para reflexionar e intentar enmendar errores y planificar el futuro sobre una base sólida, y ese es el camino que muchos quieren para el Real Mallorca.

La dimisión forzada por las circunstancias de Jaume Cladera ha dejado varias incógnitas sobre el balance de mayorías y minorías en el Club, el nuevo reparto de cargos, etc.

Y para qué, para seguir como hasta ahora, sería un error. La lógica impone una revisión urgente de las cuentas. Saber en qué se gasta el dinero realmente el Mallorca, y cómo puede sobrevivir al imparable agujero económico de demandas, fichajes inútiles...

Lo más urgente sería hacer una auditoria externa, en ella saldría a la luz cómo han quedado los fichajes de Ratinho, Joao Víctor, Alfaro, los 500.000 euros de Conceiçao... y como no, saber qué periodistas tiene en "nómina" el Mallorca, estos mismos que decían que Cerdà debía abandonar la isla y que ahora dan por hecho el pacto Serra Ferrer - Biel Cerdà.

Ayer mismo Utz Claassen apuntaba la vía del razonamiento frente a la de repartir cargos, aseguró no tener ningún pacto «de ningún tipo» con Biel Cerdà. «Para evitar especulaciones falsas, no he pactado nada con nadie, lo importante es el club y este, en mi opinión, necesita un cambio fundamental», explicó

Claassen explicó que dada la situación deportiva, financiera e instituciona "En todos los aspectos este club necesita un cambio radical", dijo y añadió "No es cuestión de repartir cargos, es momento de gestión, de una gestión diferente. Hay que modificar procesos, apostar por la gestión, no por los puestos vacantes. Esto para mí es innegociable. Se hace imprescindible un cambio", manifestó y apuntó "El Mallorca tiene una oportunidad única y singular de marcar los tiempos en un nuevo modelo de gestión. Es una situación difícil y complicada, pero esto nos obliga a introducir nuevas ideas, ser responsables. Tenemos el ejemplo anterior con Jaume Cladera, que hacía muchas cosas lejos del consejo y estamos a dos puntos del descenso, con unas perdidas de 50.000 euros diarios según el resultado de explotación y con demandas peligrosas. El viejo modelo de gestión ha fracasado y necesitamos otro" indicó el consejero del Real Mallorca.

El futuro del Mallorca pasa por revisar las cuentas