jueves. 28.03.2024

El Grupo Socialista registrará este miércoles en el Congreso una solicitud de comparecencia urgente de los ministros de Fomento, Ana Pastor, e Industria, Comercio y Turismo, José Manuel Soria, para que den cuenta en sede parlamentaria de la situación de la empresa Orizonia y para que planteen soluciones que garanticen la viabilidad de la compañía.

Así lo ha explicado a la prensa el portavoz socialista de Fomento, Rafael Simancas, tras reunirse durante casi una hora con una representación del Comité de Empresa de la empresa, encuentro al que también ha asistido el responsable de turismo del PSOE, Sebastián Franquis.

Simancas quiere que los ministros implicados en este conflicto laboral "se impliquen en la solución de este problema" con decisiones que garanticen la "viabilidad de la actividad turística y del transporte, así como el mantenimiento de los puestos de trabajo", tanto en Orizonia como en otras empresas turísticas que están atravesando dificultades, como Iberia, Aena o Spanair.

¿PARA QUÉ QUEREMOS MINISTROS?.

El socialista ha lamentado la "sangría" que en los últimos meses se está produciendo en el sector turístico y la "riada" de empleos que se están perdiendo. "No nos lo podemos permitir, esto tiene que parar. El Gobierno tiene que implicarse, no puede limitarse a contemplar como un mero espectador lo que está ocurriendo, quiebra tras quiebra, ERE tras ERE. Esto no puede continuar así", ha afirmado.

Por eso, ha exigido a Pastor y Soria que se reúnan con los trabajadores afectados porque "están sumamente preocupados" con la posibilidad de que, "de la noche a la mañana, se puedan quedar sin sustento". Así, ha insistido en que es el Ejecutivo el que "puede liderar" las posibles soluciones al problema.

"No pueden quedarse tras la barrera contemplando cómo pasan las cosas simplemente. No sé para qué tenemos ministros si se limitan a ver los telediarios y contemplar las noticias sin implicarse", ha reprochado.

SITUACIÓN "DESESPERADA".

Por su parte, el responsable estatal de Servicios Turísticos de UGT, Alfredo Herranz, ha asegurado que están trabajando "a la desesperada", acudiendo "a todas las puertas posibles" donde puedan encontrar soluciones y pidiendo "implicación política al máximo nivel" porque Orizonia está "prácticamente en quiebra".

"Estamos intentando buscar cualquier punto de encuentro con la administración, y seguiremos insistiendo en intentar buscar fórmulas para poder arreglar esta situación, que es un drama", ha dicho, recordando que "lo que está claro es que los trabajadores no son los culpables" de la situación de la empresa y lamentando que, "como siempre", serán quienes "acaben pagando los platos rotos".

A renglón seguido, el dirigente sindical ha criticado que los empleados de Orizonia se estén enterando de "prácticamente" todos los acontecimientos a través de los medios de comunicación porque la dirección de la empresa no les mantiene informados. De hecho, este mediodía está prevista una reunión en Palma de Mallorca donde esperan conocer cómo están las cosas con mayor detalle.

Sin embargo, desde UGT temen que "no haya una solución inmediata" debido al impago de 15 millones de euros por parte de la compañía al banco BSP --el que paga los billetes de avión--, lo que conlleva la retirada de la licencia que le permite vender billetes por parte de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).

En este sentido, Herranz ha indicado que Orizonia tiene dinero, aunque "no se sabe si el suficiente" para afrontar el pago completo, y ha recordado que la compañía pertenece a varios fondos de inversión, entre ellos Carlyle Group, que "mueve miles de millones" por lo que "pagar 10 millones al BSP sería como pagar un café".

Por eso, ha exigido a los propietarios de la empresa turística que "respondan a la situación". "Por 10 millones de euros están dispuestos a que 5.000 trabajadores vayan al paro. Carlyle es el primero que tiene que responder, y le exigimos que abone los pagos que le corresponden. En las épocas de bonanza este tipo de fondos vienen, se instalan en el país y, cuando las cosas van mal, salen escopetados. Pues no, les exigimos su responsabilidad, y también a la dirección de Orizonia, que son los que tienen que dar soluciones", ha añadido.

UNOS 4.000 DESPIDOS.

Herranz también ha recordado que, hasta conocerse la posibilidad de que Orizonia se declarara en concurso de acreedores estaba abierta una mesa de negociación de un ERE temporal de reducción de jornada, posibilidad que "hoy ya no tiene sentido".

"Los trabajadores estábamos haciendo un esfuerzo para buscar la máxima viabilidad de la empresa, pero ahora no sabemos nada. Nosotros seguimos apostando por su viabilidad, pero si esto está abocado al cierre es la compañía la que tiene que hacer el movimiento. En los medios hay diferentes informaciones que nos hacen pensar que, en breve, habrá un ERE de extinción, pero lo desconocemos en este momento y nosotros aún tenemos esperanzas de solventar esto", ha dicho.

No obstante, para lograr superar esta coyuntura "tiene que haber una apuesta política de primera magnitud" y "es fundamental que el ámbito político intervenga". "Si no, vamos a tener un auténtico drama y 5.000 familias más en el desempleo", ha concluido el dirigente de UGT.

Según ha informado Orizonia, la intención es presentar un concurso voluntario de acreedores con un expediente de extinción de trabajadores que afectará a entre 3.000 y 3.500 empleados. No obstante, si se logra vender parte de Orbest y Vibo, quedarían en la plantilla unos 1.000 trabajadores de los 5.000 que cuenta actualmente esta compañía. De este modo, desaparecerá todo el grupo mayorista, así como el touroperador y Viajes Iberia.

El PSOE exige al Gobierno que garantice la viabilidad de Orizonia