El Pi-Proposta per les Illes denuncia la permisividad con la venta fraudulenta de productos en los alrededores de mercados como el de Pere Garau que terminan con la competitividad del pequeño comercio.
Cada vez proliferan más los vendedores ilegales en los alrededores de los mercados de Palma. Venden productos de toda clase sin los permisos pertinentes, el etiquetado reglamentario, o las garantías exigidas, es decir, de forma totalmente fraudulenta, lo que les permite poner unos precios irrisorios y dinamitar así la competitividad de los mercaderes que sí cumplen con la legalidad . Su negocio deja de ser rentable.
El PI pide una actuación más contundente por parte del Ayuntamiento de Palma hacia un problema que va en aumento en los alrededores de todos los mercados de Palma, y de forma más intensa en el de Pere Garau donde se pueden llegar a juntar más de veinte comerciantes ilegales.
El Pi-Proposta per les Illes recuerda que los comerciantes pagan cuantiosas cuotas para poder vender sus productos en los mercados, que pagan impuestos y que además venden productos que cumplen estrictamente las normas de etiquetado y sanidad. Sin embargo, se encuentran desamparados ante la copetència desleal y la permisividad de las autoridades locales. Es más, son los mismos venendors quienes denuncian que hasta ahora poco han hecho los cuerpos de seguridad.
El PI se ve en la obligación de recordar que el pequeño y mediano comerciante es uno de los grandes perjudicados por la dejadez del Govern y por la crisis económica e insta a las instituciones a no dejar de lado uno de los sectores esenciales de la economía balear .
