viernes. 19.04.2024

Guillem García Gasulla, uno de los tres diputados socialistas que declinaron seguir las directrices del PSOE de apoyar la ley que regula la abdicación de Juan Carlos I, ha revelado que su intención no era abstenerse, sino votar en contra, y que ante esa tesitura prefirió ausentarse del Pleno del Congreso para no "incomodar" y para evitar el "malestar" que podría haber generado en la dirección del partido.

Este diputado de Baleares, médico de profesión, fue uno de los que había enviado una carta a la dirección del Grupo Socialista pidiendo un debate interno y reclamando incluso la posibilidad de conceder libertad de voto a los diputados y senadores y senadores del PSOE en la tramitación de la ley de abdicación.

Cuando se realizó la votación en el Congreso, pública y por llamamiento como había solicitado Izquierda Plural, García Gasulla optó por no estar en el hemiciclo, al igual que la gallega Paloma Rodríguez Vázquez. Sólo uno de los díscolos, el guipuzcoano Odón Elorza, se quedó en el Pleno y se decantó por la abstención.

En un artículo publicado en su página personal y recogido por Europa Press, el diputado del PSIB revela que su intención no era abstenerse, sino votar en contra de la ley de abdicación que abre la puerta a la sucesión en la Corona y a la proclamación de Felipe VI como nuevo Rey de España.

ADMITE QUE IBA A GENERAR MALESTAR

"Ante el malestar que parece iba a ocasionar mi voto negativo entre las personas que dirigen el partido que me presentó como candidato en las elecciones generales de 2011, tomé la decisión de ausentarme de la votación, evitando incomodar y asumiendo la responsabilidad de este hecho", ha explicado.

García Gasulla señala que decidió optar por la ausencia "aún a riesgo" de violentarse a sí mismo, pero "fiel al principio médico del 'primum non nocere' (en primer lugar, no hacer daño)".

Este diputado, así como Odón Elorza y Paloma Rodríguez, se expone ahora a una sanción por parte de la dirección del Grupo Socialista que, tras escuchar sus argumentos decidirá la cuantía de la multa, que puede llegar a los 600 euros.

El diputado del PSIB, García Gasulla, iba a votar no a la abdicación