viernes. 29.03.2024

El conseller de Educación y Cultura en la última legislatura de Jaume Matas (2003-2007), Francesc Fiol, quien este lunes ha declarado como testigo ante el juez instructor del caso Palma Arena, José Castro, ha atribuído al exjefe del Ejecutivo balear la iniciativa de contratar al arquitecto Santiago Calatrava para la elaboración del anteproyecto de una ópera de Palma que nunca llegó a ser construida. El ingeniero cobró por este encargo 1,2 millones de euros públicos.

En concreto, Fiol ha comparecido ante Castro durante unos veinte minutos después de que el pasado martes el magistrado acordase mediante un auto el archivo de la imputación que pesaba sobre Fiol así como la del propio Calatrava.

Durante su declaración, Fiol, quien el pasado mes de enero cursó su solicitud de sobreseimiento, ha defendido la "completa legalidad" con la que se ejecutó el expediente de contratación de Calatrava, cuya tramitación fue llevada a cabo por el Instituto Balear de Infraestructuras y Servicios Educativos y Culturales (Ibisec) -dependiente de la Conselleria de Educación- que él mismo presidía.

De este modo, ha negado ante el juez que durante la tramitación de este procedimiento administrativo se incurriese en delito alguno, tal y como ha puesto de manifiesto Fiol en declaraciones a los medios de comunicación. "El procedimiento se ajustó a derecho", ha insistido.

En lo que al papel de Matas se refiere, el testigo ha manifestado que la idea de contratar al conocido arquitecto valenciano partió del exministro, quien se reunió con Calatrava para abordar la posibilidad de contar con sus servicios. "Es entonces cuando se inició el expediente. Las responsabilidades estaban claras desde el primer momento", ha recalcado en este sentido.

No obstante, al ser preguntado sobre el motivo por el que Matas sí continúa encausado en esta pieza, Fiol ha aseverado no ser él "quien tiene que decir si debe estar imputado o no".

Según manifestó Calatrava ante el juez, Matas fue la persona que solicitó sus servicios para realizar un desarrollo inicial de la remodelación del Moll Vell que culminase con el levantamiento de un teatro de la Ópera, lo que fue perfilándose en varias reuniones de trabajo en la sede del Ejecutivo autonómico, en las que estuvieron presentes tanto Matas como el arquitecto y su equipo.

El ingeniero negó en su día que el anterior Govern del PP le favoreciese de forma irregular al adjudicarle, por encargo de Matas, la elaboración del anteproyecto, al tiempo que rechazó tajante haber pagado comisiones por recibir este encargo.

De hecho, su defensa alegó que es "habitual, y así lo permite la Ley de Contratos del Estado", que este tipo de desarrollos urbanísticos se lleven a cabo mediante un procedimiento de adjudicación directa y no por medio de un concurso público, "cuando se quiere contratar a un arquitecto de la singularidad y creatividad de Calatrava".

FIANZA CIVIL DE 1,6 MILLONES DE EUROS PARA MATAS

En cuanto a Matas, Castro decretó contra él una fianza de responsabilidad civil de 1,6 millones de euros a petición de la Fiscalía Anticorrupción ante los posibles perjuicios económicos que se derivaron de la contratación de Calatrava. Las acusaciones apuntan a que el exministro habría incurrido en delitos de malversación de caudales públicos, fraude y prevaricación.

Sin embargo, la defensa de Matas negó que su patrocinado hubiera cometido delito alguno en la adjudicación del anteproyecto y tachó de "infundios" las acusaciones de la Fiscalía y de la letrada de la Comunidad Autónoma. Además estimaba la petición "no ajustada a hechos ni a derecho", dado que "se apoya en indicios incriminatorios, que no son tales, sino sólo sospechas o conjeturas que en modo alguno pueden legitimar un procedimiento penal" contra él.

CASTRO: "SE DA POR SUPUESTO QUE MATAS NO DESCENDIÓ A PIE DE OBRA"

Frente a ello, Castro manifestó en su auto que "se da por supuesto que no descendió a pie de obra, faltaría más, pero existen sobrados indicios de que marcó las directrices" a fin de disponer de los servicios del ingeniero.

Tanto es así que, según el instructor del caso Palma Arena, el exjefe del Ejecutivo autonómico dio instrucciones para que se ultimara la tramitación del expediente de contratación "a costa de lo que fuera, incluida la falta de respeto a la Ley y a la realidad, al sólo objeto de que se resolviera a favor de la persona ya decidida y para que ésta fuera electoralmente utilizada sin importarle que el erario público pagara por ello".

El juez insistía además en que los términos de la contratación de Calatrava ya estaban decididos antes de que se materializase, según se desprende de la declaración vertida por los demás imputados de esta pieza de la causa.

EL EXPRESIDENTE ASUMIÓ SU RESPONSABILIDAD SOBRE LA CONTRATACIÓN

Mientras tanto, el propio Matas, durante la declaración que prestó ante el juez en febrero de 2011 en calidad de imputado, asumió su responsabilidad sobre la elección del arquitecto valenciano para que realizase el anteproyecto si bien defendió la legalidad de su contratación, que se efectuó de forma directa y sin concurso pese a lo elevado de la cantidad que se le abonó.

En su comparecencia, el encausado del caso defendió que su decisión fue "política" y "plenamente legítima", que después fue elevada al Consell de Govern, y justificó la selección y contratación sin ningún concurso previo por ser una persona "muy cualificada técnica y artísticamente". En este sentido, incidió en varias ocasiones en que la pretensión del Govern balear era contar únicamente con los servicios del prestigioso arquitecto e ingeniero.

Cabe recordar que el anteproyecto de la ópera de Palma no se llegó a ejecutar debido a una prohibición por parte de la Junta Electoral en 2007, puesto que se pretendía presentar poco antes de las elecciones autonómicas y municipales de ese año.

Fiol atribuye a Matas la iniciativa de contratar a Calatrava para la Ópera de Palma