jueves. 28.03.2024

La Fiscalía Anticorrupción investiga si el pago de más de 100.000 euros por parte del Govern a distintos proveedores que prepararon la presentación de una Ópera en Palma que no llegó a ver la luz, se fraccionó en una decena de contratos menores -de entre 9.000 y 12.000 euros aproximadamente- para que éstos pudieran ser adjudicados de forma directa y sin concurso, según han informado fuentes jurídicas.

Se trata de unos hechos por los que el juez instructor del caso Palma Arena, José Castro, ha imputado este martes a la que fuera secretaria general técnica de la Conselleria de Vicepresidencia durante ese mandato, Jane King, quien esta mañana estaba citada como testigo y finalmente ha sido emplazada a comparecer como encausada el próximo 14 de octubre, a las 10.00 horas.

Mientras tanto, han sido interrogados a lo largo de la mañana un total de cinco testigos, quienes han prestado declaración ante Castro, el fiscal Pedro Horrach, la Abogacía del Govern y el letrado del expresidente del Govern Jaume Matas.

Los declarantes han señalado que realizaron diversos trabajos de montaje, control técnico e instalación -de una carpa y una tarima- de cara a la presentación del palacio de la Ópera, un acto que, han explicado, finalmente no se llevó a cabo debido a que horas antes así lo había prohibido la Junta Electoral en 2007 ante la proximidad de las elecciones autonómicas y municipales de ese año.

La Ópera fue proyectada al término de la última legislatura de Jaume Matas (2003-2007), y la elaboración de su anteproyecto fue adjudicada al arquitecto Santiago Calatrava, quien cobró 1,2 millones de euros públicos por este trabajo. Según varios testigos, fue Matas quien dio la orden de contratar directamente al artista valenciano y quien fijó el precio que se le debía abonar.

Cabe señalar que, en el caso de King, quien fue número dos de la exvicepresidenta del Govern y actual eurodiputada Rosa Estaràs, se encuentra imputada en otras piezas del caso Palma Arena, en el marco de cuya instrucción señaló ante Castro cómo, durante la construcción del velódromo palmesano, advirtió a Matas de que el coste de la infraestructura "se estaba disparando".

Según sus palabras, el exjefe del Ejecutivo autonómico le respondió que "había que acabarlo como fuera", escudándose en la celebración del Mundial de Ciclismo en Pista de 2007. En concreto, a nivel global el caso Palma Arena indaga el supuesto desvío de más de 50 millones de euros durante la ejecución del velódromo y su conexión con el enriquecimiento supuestamente ilícito de Matas así como con la presunta financiación irregular del PP balear.

King fue además condenada a un año y medio de cárcel y a tres de inhabilitación, por un delito de malversación y otro de prevaricación, en el marco del segundo juicio celebrado por el caso Palma Arena, a raíz de la adjudicación de un contrato menor de 12.000 euros públicos por la realización de un estudio sobre accesibilidad del que no existe constancia.

Castro imputa a Jane King por el fraccionamiento de contratos de la Ópera de Calatrava