jueves. 28.03.2024

La Alianza Mar Blava sigue tratando de averiguar quién realizó los sondeos acústicos que se detectaron en aguas baleares en abril de 2013 y cuya autoría la Consellería de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern balear atribuyó inicialmente a la compañía Seabird Exploration. Así mismo, la Alianza quiere saber dónde se llevaron a cabo en realidad (en qué zona estaba actuando el barco con los cañones de aire comprimido (airguns) y si, de haber sido en aguas españolas, la empresa o entidad que los realizó, contaba con autorización de la Administración.

A fecha de hoy, la Alianza no ha recibido contestación alguna por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) a su solicitud de información ambiental al respecto de estos sondeos acústicos, presuntamente ilegales.

El 11 de agosto pasado, la Alianza solicitó al MAGRAMA esa información, acogiéndose a la Ley 27/2006, de 18 de julio, por la que se regulan los derechos de acceso a la información, de participación pública y de acceso a la justicia en materia de medio ambiente. Transcurrido el plazo de un mes que marca dicha ley a la Administración para contestar, la Alianza no recibió respuesta alguna del MAGRAMA.

Teniendo en cuenta que, en estos casos, el silencio administrativo tiene carácter positivo para el solicitante, la Alianza presentó el 7 de octubre un nuevo escrito reclamando la ejecución del derecho al acceso a la información medioambiental en relación con los sondeos acústicos presuntamente realizados por Seabird Exploration en aguas baleares en el año 2013. La respuesta debería haber sido automática, pero aún no se ha producido.

Por parte de la Consellería de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern balear, la Alianza ha recibido copia de todos los documentos que solicitó en septiembre, tras serle facilitado por la Comisión Balear de Medio Ambiente el índice de los documentos que obraban en el expediente sobre el proyecto de prospecciones sísmicas de Seabird Exploration en el golfo de Léon. Del examen de estos documentos la Alianza no ha podido sacar ninguna conclusión sobre la autoría de estos sondeos detectados en 2013, ni, obviamente, si sus autores tenían autorización para llevarlo a cabo.

Sí se deduce en cambio, incluso dando por buena la conclusión que plasma la Consellería en su informe de 8 de septiembre de 2014 de que el foco emisor de esos sondeos se encontraba “fuera del mar Balear” y, en cualquier caso, “muy lejano a las aguas de las Islas Baleares”, que esos sondeos acústicos produjeron afecciones sobre espacios y variables ambientales a nivel balear. Independientemente de la distancia a la que se efectuaran esas adquisiciones sísmicas, organismos independientes detectaron que a consecuencia de ellas se produjeron, en aguas baleares, movimientos erráticos de rorcuales y cachalotes, precisamente en una época crítica, la

reproductora, y sobre unas especies en franca regresión y protegidas a nivel nacional e internacional.

Los organismos científicos versados en la protección de los mamíferos marinos entienden, entre otros, como afecciones significativas o graves a éstos: cambios de rutas en los procesos migratorios, alteraciones a ejemplares en fase de lactancia, alteraciones en periodo reproductor. Todo esto se produjo como consecuencia de esas prospecciones sísmicas que se detectaron en abril de 2013, y demuestra fehacientemente que la contaminación acústica de las prospecciones sísmicas se transmite cientos de kilómetros en horizontal, produciendo impactos negativos a la fauna que habita esas aguas incluso aunque estuvieran posicionados lejos del foco emisor.

Ante la gravedad de los hechos, ante el silencio del MAGRAMA, y tras conocer que la Dirección General de Política Energética y Minas (DGPEM) del Ministerio de Industria, Energía y Turismo (MINETUR) había puesto en marcha unas diligencias para investigar estos hechos (como se deduce del escrito de fecha 1 de septiembre de 2014 que la DGPEM envió a la Dirección General de Medio Rural y Marino de la Consellería de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern balear), la Alianza Mar Blava ha solicitado al MINETUR personarse en dichas diligencias -o expediente- abierto por este ministerio específicamente en relación a los referidos hechos.

“Esperamos que de una vez por todas se acabe el secretismo que parece existir en torno a estos misteriosos sondeos acústicos, presuntamente ilegales, detectados en 2013”, ha declarado los portavoces de la Alianza Mar Blava.

Alianza Mar Blava pide al Gobierno información sobre los sondeos acústicos de 2013