jueves. 28.03.2024

La familia de Francesc, la APIMA del CEIP Melcior Rosselló de Santa Maria y FAPA Mallorca, denuncian la inoperancia de la Consellería de Educación ante la agresión sufrida por Francesc, un niño con una discapacidad, a manos del ATE (auxiliar técnico educativo) que lo tenía a su cargo.

El maltrato del niño tiene origen al curso pasado, en aquel momento la Consellería abrió un expediente pero, al contrario que en otros casos, en este, la Consellería de Educación no llegó a actuar de forma efectiva, la investigación se dilató injustificadamente y el ATE continuó en el centro a lo largo de todo el curso pasado. Además, a pesar de las circunstancias este curso lo han vuelto enviar al centro y hoy continúa.

Francesc, este año alumno de primero, es un niño con necesidades educativas y de acuerdo con sus circunstancias el año pasado se destinó al centro un ATE para atenderlo en todo cuando fuera necesario para facilitar su inclusión y garantizar su derecho a la educación.

Desafortunadamente, desde el principio de curso pasado la tutora de Francesc detectó que había indicios de que la tarea del ATE no era la adecuada y el mes de noviembre junto con el equipo de apoyo se emitió un informe que ya explicaba que era “muy brusco con el niño”, que lo sujetaba fuerte del brazo y que le metía la comida en la boca

de cualquier manera.

LA AGRESIÓN

El día 24 de febrero de 2014 mientras se desarrollaba la clase de inglés de infantil y en presencia de sus compañeros de clase y de la profesora, la ATE perdió los nervios. Primero maltrató al niño para obligarlo a coger un color del suelo y después le pegó un golpe fuerte en la cabeza con la mano.

La profesora de inglés comunicó inmediatamente a dirección los hechos y al día siguiente ya se había enviado al Departamento de Inspección Educativa una comunicación explicando los hechos. La dirección del centro a pesar de la limitación de los recursos humanos del centro y que la tarea casi exclusiva del ATE era la atención de Francesc reorganizó provisionalmente a los trabajadores para evitar que el agresor tuviera que volver a relacionarse con el niño y así protegerlo, mientras la Consellería adoptaba medidas y resolvía la situación.

Las primeras actuaciones de la Consellería se demoraron más de un mes, exponiendo la víctima a la convivencia diaria de su agresor porque en ningún momento se adoptaron medidas cautelares y fue enl tercer trimestre de curso cuando se dotó de una nueva ATE al centro para poder atender a Francesc.

A todo esto el ATE, que había provocado esta situación, continuaba en el centro y no fue hasta el día 17 de junio cuando el Departamento de Inspección envió el instructor para tomar testigo de la profesora que había observado la agresión. También se tomó declaración a los profesionales que tenían relación con el niño y el ATE. Los interrogatorios se produjeron en presencia del ATE, la secretaria y la instructora que llevaba el proceso.

Hasta aquel momento, a la madre de Francesc no se le habían comunicado los hechos acontecidos el 24 de febrero y desconocía la existencia de testigos que acreditaran una agresión a su hijo.

A pesar de esto, con el curso acabado y atendidos los acontecimientos, la madre, el equipo directivo, el APIMA que había apoyado como representante de las familias y los testigos afectados confiaron en una resolución inmediata de la Consellería y que muy probablemente se procedería a la sustitución del ATE denunciado por otra persona en el curso siguiente. Sólo por este motivo no se cursó denuncia por otras vías.

El INICIO DEL NUEVO CURSO

Para sorpresa de todo el mundo, a principio del curso 2014-15, la Consellería de Educación envió el mismo ATE que había pegado en Francesc e inmediatamente se tuvieron que reactivar las peticiones por parte del nuevo equipo directivo a la Consellería y por parte de la madre y de la APIMA a varias entidades, como por ejemplo la Defensora del Menor y FAPA Mallorca.

La Defensora del Menor, valoró los hechos como muy graves e inició actuaciones. En la última conversación mantenida con ella valoraba la posibilidad de poner en conocimiento de la fiscalía los hechos acontecidos.

FAPA Mallorca conoció los hechos a finales del mes de septiembre y atendida la gravedad de los hechos y la especial vulnerabilidad de Francesc se iniciaron contactos personales con los responsables de la Consellería de Educación.

Primero con la Isabel Cerdà, con quien se ha hablado en dos ocasiones y se le han enviado dos correos electrónicos para exponerle con detalle la situación. En la última conversación telefónica la Cerdà pedía paciencia y tiempo, la paciencia es difícil de mantener cuando alguien que ha pegado a tu hijo y no pasa nada, y tiempo ya ha pasado demasiado.

Después, en vista de la nula capacidad resolutiva de la DG de Innovación, el 19 de octubre FAPA Mallorca comunicó con la nueva Consellera a quien también se expuso la gravedad de la situación con todo detalle. Acusó recibo pero no ha resuelto nada.

Así pues, la familia de Francesc, con el apoyo del APIMA del Melcior Rosselló como representante del colectivo de familias y también con el apoyo de FAPA Mallorca, se ve ahora obligada a poner en conocimiento de la opinión pública los hechos para forzar alguna respuesta y en pocos días se comunicará al juzgado correspondiendo esta situación.

La intención no es sólo denunciar el agresor, que ahora parece que ha reconocido los hechos, sino que se pondrá en conocimiento del juzgado la ineficacia de la Consellería para asumir su responsabilidad y velar por la atención y la seguridad de Francesc, vulnerando así sus derechos.

Para los afectados es injustificable que ocho meses después de una agresión a un niño con estas circunstancias la Consellería no haya sido capaz de encontrar alguna solución.

Denuncian el maltrato a un niño discapacitado y la pasividad de Educación ante el hecho